e siembra en julio y cosecha a fines de octubre o principios de noviembre. Además, comparado con el cultivo de trigo, consume 100 mm menos de agua. Esto hace que el cultivo posterior pueda aprovechar esta ventaja y traducirlo en rendimiento. El hecho de ser una leguminosa y que se inocula como la soja, favorece la absorción del Nitrógeno atmosférico quedando disponible también para el cultivo posterior. Además, por la densidad de plantas del cultivo y por contar con una raíz pivotante, actúa en los lotes, como un subsolador natural del suelo, favoreciendo la infiltración del agua de lluvia y evitando el escurrimiento que termina erosionando los campos de la zona.
El grano es un excelente componente de las dietas animales, ya que se asemeja al de maíz en cuanto a la energía proporcionada y un excelente nivel de proteínas, semejante al de soja.
Hemos podido validar, en el INTA Concepción del Uruguay hasta un 40% de la dieta base maíz para terminación de novillos.
También pudimos validar hasta un 21% en las dietas base maíz en terminación de cerdos en sistemas intensivos, existiendo datos empíricos de productores locales (E. R.) que han llevado ese porcentaje al 38% de la dieta, como los sugieren los trabajos científicos de otros países. También en gallinas ponedoras, hay productores avícolas que lo están usando entre el 15 al 30%, con muy buenos resultados, tal como lo referencia la bibliografía internacional.
Con el mejoramiento genético se ha avanzado con el desarrollo de cultivares de arveja. Dos nuevos cultivares, uno verde y uno amarillo, denominados Primogénitas (no transgénicas), obtenidos por un convenio entre la FCA (UNR) y el INTA EEA Oliveros, se están probando en la Red Nacional de Cultivares de Arveja del INTA y seguramente estarán disponibles el próximo año, a través de una serie de semilleros multiplicadores y cooperativas de todo el país.
Este logro será un gran aporte para cubrir un gran cuello de botella que hoy complica la expansión del cultivo, y más si tenemos en cuenta la apertura del mercado chino para las legumbres argentinas.
Esto repercutirá en una reducción de los costos de implantación del cultivo, fundamentalmente en el rubro semilla.
INTA