l hábito de crecimiento de las variedades cultivables es indeterminado, con respuesta fotoperiódica cuantitativa a días largos.
El clima ideal es templado a templado frio, con inviernos largos pero suaves, si bien resiste heladas durante la germinación y primeros estadios, estas pueden afectarla seriamente si ocurren a partir de la floración y formación de las chauchas. Por otra parte las temperaturas altas causan un decaimiento en las plantas, acortando el ciclo de producción.
Prefiere suelos sueltos, fértiles, algo húmedos, que tengan materia orgánica en descomposición. Durante la formación y llenado de vainas, tiene su fase crítica por falta de agua. El cultivo requiere un 60% de la capacidad de campo desde la emergencia hasta prefloración y un 90% en la floración.
Aunque puede realizarse en cualquier época del año, conviene hacerlo en los meses de otoño (abril-junio) en zonas templadas y templadas frías (julio-agosto).
Las variedades de semilla lisa son más resistentes al frio que las de semillas rugosas y las de hoja verde oscura más que las de color verde claro. En condiciones óptimas de temperatura y humedad la semilla germina en 1 semana.
El cultivo se efectúa de asiento, depositando la semilla en surcos, cada 30 cm y a una profundidad no mayor de 5 cm. En las variedades enanas (que no se tutoran) las hileras se distancian 30–40 cm. En las variedades de enrame, se distancian a 60 cm.
Se pueden diferenciar entre las de Grano Verde: Onward Cuarentona, Cobrí, Mikad; y las que se usan para grano Seco: Cobrí y Mikado.
Cuando las plantas tienen unos 15 cm de altura se les hace un aporque para favorecer la formación de raíces. En las arvejas de enrame se colocan tutores cuando las plantitas tienen unos 30 cm de alto, empleándose canas o ramas formando caballetes o bien con alambrados a lo largo de la plantación.
Las enfermedades más comunes que pueden aparecer son el Tizón. Las hojas muestran manchas pardo-rojizas. Si hay tiempo húmedo y lluvioso después de la siembra, el cultivo puede ser destruido. Se propaga por rastrojo y semilla. Por eso debemos usar semilla sana. Otro hongo es la Antracnosis, favorecida por lluvias intensas durante la floración y formación de vainas. Se presenta con manchas pardas de margen o contornos oscuros en vainas, hojas y tallos. En las dos enfermedades mencionadas, el control se lleva a cabo usando semilla de buena calidad y además tratando el cultivo (sobre todo en floración) con un funguicida.
Dentro de las plagas podemos nombrar ataques de gorgojos, pulgones e isocas, para lo cual debemos recorrer el cultivo, revisarlo desde la base hasta las hojas superiores y en caso de ataque fuerte controlar con insecticida.
Se puede hacer en verde para consumo fresco (a los 120-150 días de la siembra, según la textura del grano) o de lo contrario cuando las plantas han terminado su ciclo vegetativo (amarilleo general, la vaina se desgrana fácil) para grano seco.
Infoagro