Los helechos, que se comercializan en distintos tamaños y formas, son perfectos para darle color a jardines, patios y galerías, debido a que sus hojas de tonalidad verde intensa crecen bien a la sombra y adoran la humedad. Se trata de una especie ancestral que no florece ni genera frutos, aunque desarrolla un follaje por demás vistoso que levanta cualquier ambiente.
En interiores, el helecho suele sufrir la sequedad producto del uso del aire acondicionado y los sistemas de calefacción. Si bien será necesario regarlo una y otra vez, crecerá sin mayores inconvenientes, dándole a la casa un aspecto armónico nunca antes visto.
Entre las especies más populares en el país, se destacan:
1) Culandrillo (Adiantum). Originario de la selva tropical americana, donde la humedad es alta y la temperatura no baja de los 18 grados, requiere luz intensa filtrada, riego abundante y sustrato liviano. También agradece la pulverización de su follaje con agua de lluvia o destilada. Es una planta rizomatosa, con tallos negros y frondas delicadas de textura similar a una gasa.
2) Helecho fuerte (Blechnum). Originario de Sudamérica, es un helecho característico del sotobosque húmedo y sombrío de las selvas de este lado del continente. Crece con luz filtrada, temperaturas medias y abundante riego. Es de color rojo intenso en sus hojas nuevas, que suelen contrastar con las más maduras de tonalidad verde profundo. En ocasiones forma rizomas robustos.
3) Nefrolepis o helecho espada (Nephrolepis). Es uno de los helechos más populares. Tiene forma de serrucho y se desarrolla tanto en interiores como exteriores. Requiere luz filtrada y brillante y buena humedad ambiente.
En caso de que pierda algunas de sus hojas por falta de riego o la sequedad de la tierra, puede cortarse al ras a fin de que rebrote. Se trata de una variedad muy rústica que se ofrece con follaje rizado u ondulado.
4) Polypodium (Phlebodium). Posee hojas largas con lóbulos irregulares de color verde azulado o glauco según la variedad. De acuerdo a expertos, genera efectos medicinales positivos, ya que el té que se obtiene de sus hojas ayuda a tratar afecciones biliares. Debe ser pulverizado a diario en verano y tres veces por semana en invierno, siempre y cuando que no se halle prendida la calefacción. De lo contrario, se regará como en temporada estival.
5) Cuerno de arce (Platycerium bifurcatum). Se trata de un helecho epífito con dos tipos de frondas: son verdes, péndulas, colgantes y extremadamente lobuladas. La especie requiere luz filtrada, aunque nunca sol directo, y mucha humedad ambiente. Si bien no conviene pulverizar sus hojas, se regará por inmersión de la planta al agua.
Necesita de sustrato suelto y húmedo y puede cultivarse en exteriores siempre y cuando se ubique en zonas templadas libre de heladas.
6) Helecho negro (Rumohra). Posee buena plasticidad fenotípica, lo que significa que suele cambiar sus caracteres morfológicos según las condiciones del entorno. Precisa luz filtrada, suelos ácidos o neutrales y buena cantidad de agua, ya que no tolera largos períodos de sequedad. Es conocido como “helecho de hojas de cuero”, debido a la pureza de su follaje. Se utiliza mucho en florería.
Casi todos los helechos requieren sustrato liviano, poroso y bien drenado. La mezcla se compone de corteza y hoja de pino, resaca de río y turba, y tierra. Esta solución ayudará a evitar encharcamientos perjudiciales para la planta.