Los Bancos de Alimentos de Balcarce, Tandil y Mar del Plata se unieron para tornar más eficaz la adquisición de frutas y verduras que desde hace tiempo realizan mancomunadamente. En el marco del mismo acuerdo, firmaron un contrato con el INTA, que se sumó así a la iniciativa que avanza en la creación de un Centro Hortícola Solidario.
Según explicó Mario Bañiles, director ejecutivo del Banco de Alimentos Tandil (BAT), el proceso que llevaban adelante anteriormente consistía en el rescate de productos de los mercados frutihortícolas concentradores, pero les generaba altos gastos en logística y con una merma que se sentía cada vez más.
“A partir de ahí nos animamos a iniciar un nuevo proyecto”, contó, explicando que desde fines del año pasado consiste en retirar las donaciones directamente desde las huertas de la región y desde los lavaderos, que es donde se prepara la verdura para ser enviada a los diferentes mercados.Aseguró que la iniciativa aumentó considerablemente la verdura rescatada para los bancos y reveló que actualmente están consiguiendo un promedio de 50 mil kilos por mes que se distribuyen entre las tres entidades, de los cuales aproximadamente 12 mil kilos llegan a Tandil.
Bañiles contó que los Bancos de Alimentos tienen un terreno de 11 hectáreas alquilado dentro del predio de la Sociedad Rural de Mar del Plata, que consta de dos galpones y oficinas para conferencias, donde funcionará lo que llamaron Centro Hortícola Solidario (CHS).
El acuerdo con el INTA consiste justamente en ceder a la institución ese espacio para que desarrolle allí una estación experimental y a la vez sirva de punto de encuentro para brindar capacitación a los productores frutihortícolas y estrechar así el vínculo con las huertas donantes.
El lugar también estará a disposición del Senasa, además de espacios abiertos para que las universidades agrarias de la zona brinden cursos a productores.
Cabe decir que los productores donan los excedentes que tienen de sus producciones de frutas y verduras, generando un círculo virtuoso y un beneficio bilateral, ya que en lugar de tirar la mercadería que les sobra la donan a los bancos que la retira, y evitan así la logística de deshacerse de esa mercadería.
Por otro lado, el titular del BAT reveló que en lo local continúan con las distintas campañas “porque la demanda no ha cesado”. Si bien las necesidades se mantienen estables con respecto a los picos que experimentaron cuando regía el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO), debido a que muchas personas pudieron retomar la actividad laboral, señaló que es mucha la ayuda que otorgan.
Vale recordar que a lo largo de 2020 entregaron alrededor de 700 mil kilos, contra 300 mil o 350 mil de períodos atrás. “Ahora está más tranquilo, de hecho hubo una merma durante el verano”, dijo.
En este sentido, reseñó que siguen coordinando con la Mesa Solidaria y la Cámara Agroindustrial para la donación de vacas que luego, gracias al frigorífico Mirasur y Cagnoli, se procesan para proveer de carne picada.
Asimismo, reveló que están a poco de poner en marcha el proyecto, que consiste en conseguir trigo, girasol y maíz que les permita abastecerse de harina, polenta y aceite.
El eco