Según el nutricionista del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Bordenave, Aníbal Fernández Mayer, el orujo de manzana que se obtiene como residuo de la industrialización de la fruta, se puede utilizar en el suministro energético de bovinos de carne o leche, debido a sus importantes ventajas nutritivas. Además de tratarse de un subproducto ecológicamente sostenible, está compuesto por una alta dosis de pulpa, cáscara y endocarpio e incluye semillas, restos fibrosos y pequeñas cantidades de jugos azucarados, vitales para el buen funcionamiento de esta clase de animales.
Cada 100 kilos de manzana, se obtienen entre 15 y 19 de orujo. Sus componentes más variables son materia seca (MS; 14-26%), fibra bruta (FB, 14-23% base MS) y proteína bruta (PB; 4-8% base MS). Dichas variaciones están influidas por el tipo de manzana, su estado de madurez y las respectivas etapas de procesamiento. Todos estos subproductos, son excesivamente palatables para los bovinos.
El ensilado es la mejor herramienta para conservar el orujo y evitar su posterior descomposición y el desarrollo de insectos. En este sentido, es necesario tapar muy bien el material para que no entre en contacto con el aire exterior o potenciales lluvias.
A pesar del bajo pH inicial del orujo fresco, la técnica permite una acidificación adicional, formando ácido láctico y alcoholes asociados a incrementos en FB y PB del orden del 30 y 20%, respectivamente. Por lo general, posee una menor concentración de energía metabolizable (±14%) en relación al material original. El fenómeno se vincula con el incremento de los niveles de fibra y la falta de nutrientes solubles en líquidos efluentes o escurridos.
El orujo es altamente resistente a la descomposición aeróbica, ya que su pH suele ser bajo y estable, a una consistencia pastosa que limita el ingreso de aire. Dicho escenario se acentuará con el ensilado, siempre y cuando el material sea tapado adecuadamente con lonas plásticas.
Le degradabilidad potencial del orujo fresco en el rumen usualmente es elevada. No obstante, la degradabilidad efectiva, que depende de la tasa de pasaje, puede reducirse entre un 16 y 40% como consecuencia del escape de partículas parcialmente fermentadas.
- MS: 15,5%.
- PB: 8,4%.
- Fibra detergente neutra: 60,1%.
- Azúcares totales: 23,3%.
- Ganancia de peso media: 0,897 kg/día.
- Grado de terminación: muy bueno, con grasa de cobertura blanca y excelente veteado.