Ante un escenario de incertidumbre, los principales destinos turísticos del país se preparan para las vacaciones de invierno (del 12 julio al 2 de agosto). Desde Las Leñas (Mendoza), anunciaron que las actividades comenzarán el próximo sábado, en tanto que en Bariloche (Río Negro) iniciarán el viernes 9. En Córdoba y Mar del Plata (Buenos Aires) se esperan resoluciones por parte del Gobierno.
Según datos oficiales, las reservas son escasas, debido a la falta de información acerca de la apertura de actividades. Manuel Pérez Diez, gerente comercial de Catedral Alta Patagonia, empresa concesionaria del centro de esquí barilochense, señaló que aunque desde el sector se preparan con entusiasmo, la situación actual es muy “agridulce”.
“Estimamos que en el mejor de los casos, vamos a darle la bienvenida a un 50% del público que hubiéramos recibido en una temporada normal. Estamos muy preocupados, porque aún no tenemos reservas. La caída es fuerte y se puede sentir, como consecuencia del cierre de las fronteras internacionales. Así, no tendremos público de Brasil, Uruguay o Chile. Como si fuera poco, están prohibidos los viajes de turismo estudiantil y las salidas grupales”, lamentó.
A pesar de este marco, la mayoría de los destinos rionegrinos se encuentran abiertos al turismo, con cierto movimiento sobre todo durante los fines de semana. En Neuquén, la apertura oficial se concretará el 9 de julio, en los centros de esquí Caviahue, Bayo y Chapelco; y los parques de nieve Batea Mahuida y Primeros Pinos. El cerro Bayo de Villa La Angostura iniciará sus actividades el mismo día, aunque una semana antes (desde el sábado) comenzará a operar para peatones.
Por su parte, Chubut habilitará el intercambio turístico este viernes, mientras que el 9 arrancarán las actividades deportivas en el centro de esquí La Hoya.
En Mar del Plata, se aguarda por el inicio de actividades durante los primeros días de julio, teniendo como referencia la excelente temporada estival. Sin embargo, la vigencia de ciertas restricciones por parte del Gobierno llena de incertidumbre el panorama.
La secretaria adjunta de la Unión de Trabajadores de Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA), Nancy Todoroff, asegura que “el receso de invierno es muy importante para la ciudad”, sobre todo en relación al sector que le compete, que fue uno de los más golpeados por la pandemia.
“Estamos convencidos de que la ciudad tiene mucho por ofrecer. Desde el Ente Municipal de Turismo trabajamos y promocionamos los destinos de cercanía, convencidos del amor de los argentinos por Mar del Plata. Desde el sector, hemos desarrollado protocolos y cursos de capacitación, a fin de brindar nuestros servicios de manera responsable”, remarcó.
Cabe destacar que en la provincia las vacaciones están previstas del 19 de julio al 2 de agosto, al igual que en Capital Federal.
El Gobierno local todavía no definió si abrirá sus puertas para el turismo en temporada invernal. Hasta este viernes, rigen determinadas restricciones a la movilidad en el territorio, debido a la importante suba de casos positivos de COVID-19 registrada en las últimas semanas. Actualmente, la provincia posee una ocupación de camas de terapia intensiva del 79%, número que parece no bajar.
De todas formas, intendentes, hoteleros, gastronómicos y prestadores de servicios de las principales áreas recreativas vienen presionando para que se liberen las actividades.
En el marco del cierre de fronteras, la provincia espera recibir un buen caudal de turistas locales, con su oferta de primerísimo nivel. Los 7.000 actores del sector turístico, gastronómico y hotelero están vacunados con al menos una dosis contra el coronavirus, mientras la zona sigue agudizando sus protocolos para presentar un servicio seguro y eficiente.
Desde el Ministerio de Turismo y Cultura de Mendoza, expresaron que Las Leñas habilitará sus actividades los primeros días de julio, mientras se aguardan definiciones por los centros de Los Penitentes, Los Puquios, Vallecitos, Puente del Inca y Las Cuevas.
Las propuestas de alojamiento son variadas, con precios y alternativas para todo tipo de gustos y bolsillos. La noche en un hotel de dos o tres estrellas o en una cabaña puede costar desde $3.000, mientras que la estadía en un establecimiento de lujo podría salir hasta $20.000.
Particularmente en Las Leñas, la semana de vacaciones ronda los $45.000 por persona, en tanto que los pases para esquiar todo el día pueden salir $5.500.
De acuerdo a un informe de Al Mundo, los destinos más elegidos para viajar en vacaciones de invierno son Bariloche, Ushuaia, Salta, Mendoza y Mar del Plata. Según el mismo análisis, los hoteles más buscados en dichas localidades son los tradicionales de 3 y 4 estrellas (77%).
En el último tiempo, la empresa también observó una fuerte apuesta por adquirir paquetes turísticos por todo el país, que en momentos como este son más fáciles de reprogramar o cancelar con reembolso en caso de complicaciones.