Por Agroempresario.com
Cabaña Don Benjamín nació el año 1991 con la adquisición de la Estancia Santo Tomás de la Sierra, en Saldungaray, provincia de Buenos Aires. Desde sus inicios, la empresa se planteó como objetivo principal la producción de reproductores y vaquillonas en sus variedades pedigree y puro registrado.
Con más de treinta años en el establecimiento, Esteban Marín, compartió con Agroempresario.com el secreto del éxito de Cabaña Don Benjamín, una empresa líder y referente en mejoramiento genético bovino.
Si bien en sus comienzos la Cabaña apostó al Polled Hereford luego fue incorporando el Aberdeen-Angus colorado, el Aberdeen-Angus negro y finalmente el Wagyu.
Con el correr de los años, otros establecimientos de Córdoba, Santa Fe y de la provincia de Buenos Aires se fueron incorporando a Don Benjamín.
Respecto al valor agregado de su producto final, y como gerente general de la Cabaña, Marín destacó el trabajo constante a lo largo de los años:
“Se trabajó con mucha profesionalidad, atendiendo a los detalles, con objetivos claros y viendo la factibilidad y la viabilidad de producción en cada uno de los establecimientos”, manifestó.
Según detalló Marín, no todos los establecimientos son iguales ni todas las técnicas son extrapolables a las distintas regiones. Con esta estrategia en mente y, siempre respetando el recurso natural fundamental en sus establecimientos, Estancias y Cabaña Don Benjamin fue cumpliendo con las metas propuestas.
“La consistencia en genética y en producción que se tiene se debe a un trabajo de muchos años en los cuales se han alcanzado logros importantes en el corto y en el largo plazo, tanto en los objetivos de producción como en los comerciales. Creo que parte del éxito está ahí junto a un grupo humano de trabajadores que tienen puesta la camiseta y que van tras los lineamientos que se propuso la empresa”, expresó.
Por otro lado, la Cabaña apuesta fuerte al mantenimiento del recurso suelo para ir mejorando la calidad genética y su producto final que “no es solamente el reproductor que le vendemos a un criador eficiente sino el bife que se pone en el plato del consumidor. Ese es realmente el producto final de una cabaña”, agregó.
Sobre las nuevas herramientas utilizadas durante el año de pandemia, Don Benjamin debió adaptarse rápidamente para incorporar nuevas modalidades de remate vía streaming.
“Fue un aprendizaje. Con un gran esfuerzo de todo el personal pudimos ir innovando sobre la marcha, viendo qué es lo que se estaba haciendo en otros lugares y adaptándolo a nuestras posibilidades. Parte del secreto está ahí. Hay muchas contras pero hay muchas otras ventajas desde el punto de vista productivo y comercial que son importantes para tener en cuenta”, precisó.
Sobre los desafíos diarios que enfrenta la producción agropecuaria del país, Marín resaltó la capacidad tanto del productor ganadero como el agrícola para adecuarse.
“En estos momentos tenemos medidas en la ganadería que impactan de manera desfavorable pero el negocio es largo (entre 2 a 5 años). Por decisiones coyunturales uno puede acomodar ciertas cosas en producción pero no puede dar una vuelta de timón completa porque queda descolocado con algún cambio posterior. Lamentablemente en Argentina vamos entre picos y valles y no en una forma estable. Son ciclos, hay que adecuarse a ellos y ver de qué forma subsistir”, subrayó.
A pesar de un contexto coyuntural adverso para el sector, puede decirse que el balance de la Cabaña para la primera mitad de 2021 fue positivo.
“Han sido muy buenos remates en cuanto a venta y colocación de reproductores.Tuvimos uno en la zona de Azul, provincia de Buenos Aires totalmente por pantalla y vía streaming. Fue un remate muy ágil y con muchos compradores, siguiendo la tónica de lo que habíamos logrado en años anteriores. La respuesta en estos dos primeros remates superó nuestras expectativas”, enfatizó.
En este aspecto, Marín destacó el carácter global de las ventas actuales donde se acercan interesados de diferentes provincias.
En lo que va de 2021, Cabaña Don Benjamín lleva realizados dos remates y tiene planeados otros tres para lo que resta del año. El próximo remate se llevará a cabo el lunes 9 de agosto.
En esta oportunidad el establecimiento ofrecerá 60 toros pedigree con características para servicio de vaquillonas, 20 vaquillonas puras de pedigree y 2.010 vaquillonas puras controladas y puras registradas.
Sobre el sistema de comercialización que tiene la empresa, vale recordar que la colocación de la hacienda se efectúa en destino y sin cargo. Por otra parte, por financiación de la cabaña trabajan a 120 días con un costo total del 6%.
Para este remate también se ofrecerán 250 días -hasta el 4 de abril de 2022- mediante la actualización del índice novillo del Mercado de Liniers por la moneda de cambio del productor. Se trata de una gran oportunidad de financiación al productor en su moneda de cambio, sin ningún requerimiento extra y sin limitar el cupo de crédito en las distintas entidades bancarias. También es una opción interesante para todo aquel que quiera transformarse de grano a carne, con un pago al contado de 6% de descuento.
Cabaña Don Benjamín trabaja con cuatro tarjetas de crédito a 180 días: Agrocabal y Procampo (10%); Banco Nación (costo total del 14%) y Galicia Rural (costo total del 15%).
“Hay un sinnúmero de posibilidades para todo aquel que esté interesado y necesitado de adquirir reproductores”, concluyó.