Por Lucrecia Degiorgis
Delfín Uranga es el presidente de la Asociación Argentina de Polo (AAP) desde junio de 2021; sin embargo el deporte ha estado presente en su vida desde que nació: “Mi padre (el gran Marcos Uranga) fue presidente de la AAP y fue el fundador de la Federación Internacional de Polo; me casé con Bárbara, hija de Gonzalo Tanoira un ex 10 de hándicap, también presidente de la Asociación, así que siempre estuve muy vinculado con el deporte”, relató. A su vez, su abuelo inauguró la cancha 2 del predio de Palermo –construida antes de la cancha 1- y según le han contado fue el mismo Delfín Uranga quien metió el primer gol ahí.
De la gestión del ex presidente de la AAP, Eduardo Novillo Astrada (h) de la cual fue vicepresidente, considera que el balance fue muy positivo: “Vino a desafiar los paradigmas del deporte, a cambiar muchas cosas y a mover la estantería”, remarcó. Siente que Novillo Astrada se llevó la parte más dura porque, cuando las cosas son de una determinada manera y uno tiene ideas distintas que quiere cambiar, se generan roces. Sin embargo, considera que hubo un trabajo muy bueno en las siguientes áreas: agrandar la base del polo, crecer en el Interior, profesionalizar más y poner al deporte en la agenda del país.
Su gestión está basada en lograr cinco ejes “más”: más jugadores, más espectadores, más patrocinadores, más seguridad y más diversión.
Para lograr el primer punto, desarrollaron una plataforma de conocimiento llamada Polo University para enseñar el deporte estableciendo una metodología y un lenguaje. También pretende llevar el deporte a nivel mundial: “Si logramos que más gente lo juegue en el mundo habrá más demanda argentina de bienes y servicios”, sostuvo.
A su vez, organizaron varios torneos de 0 a 2; de 0 a 4 y de 4 a 8 goles de handicap en todo el país con el objetivo de ampliar la base; para esto se crearon las ligas en el Interior.
Se amplió también el rango de hándicap (-1 y -2) porque, al observar la base de jugadores, había muchos con 0 y 1 gol. De esta forma, pueden tener distinta valorización y eventualmente participar de algún torneo: “En definitiva observamos qué estaba pasando en ese nivel para mejorarlo”, explicó.
El presidente también siente que están muy atrasados en la experiencia digital del deporte. Considera que es un tema fundamental y hay mucho camino por recorrer.
Uranga sostiene que la pandemia ha dejado dos grandes enseñanzas a la Asociación .
1) Darse cuenta que no podían vivir de un evento al año como el Abierto de Palermo, sino que tenían que explotar los activos todo el año: “Así fue como llevamos a cabo la idea de tener Palermo abierto los 365 días con una propuesta gastronómica, de wellness con actividad física y de trabajo on-line. Es un gran espacio verde que, al sacar las rejas, nos integra más a la Ciudad de Buenos Aires para que puedan aprovechar los millones de habitantes y turistas”, expresó.
2) Darse cuenta de la importancia de la industria del polo argentino para el mundo: “Fue entonces donde dimensionamos que Polo University podía ser una gran oportunidad para darle valor y entidad a todos los trabajadores (petiseros, banderilleros, herreros, veterinarios) que hay detrás del polo. Este proyecto tiene un costado muy ambicioso para el desarrollo personal y profesional”, referenció.
Cuando se restringieron los viajes al exterior durante la Pandemia, se pudo observar la imprescindibilidad de los trabajadores argentinos, a tal punto que no se podía practicar el deporte en otros países ya que dependían de la mano de obra argentina.
Argentina tiene varias ventajas competitivas y comparativas para poder ser un país líder en el deporte: el clima es ideal para la cría de caballos de polo; en zonas rurales, el contacto con los animales es frecuente y más fácil para iniciarse en el deporte; y es también más económico que en otros países.
En materia de objetivos a mediano plazo, “tenemos que pensar que el polo crezca en el mundo, porque al ser una industria de exportaciones, tu demanda no sólo es la local sino la internacional”, explicó.
Con respecto a la popularidad del deporte, el presidente sostiene que se debe trabajar en varios aspectos: “Primero que nada, explicar mejor las reglas del deporte así, cuando la gente ve un partido, puede entender y prestar atención; también que la experiencia del evento deportivo sea buena para que se quiera volver”, relató.
El último Abierto de Palermo recibió a más de 100.000 personas cuando el promedio eran 50.000. La idea es mirar al deporte en 360º, no sólo dentro de la cancha sino también fuera: “Una persona viene a ver el partido; al entenderlo por haber mejorado la enseñanza, se suman las chances de que quiera aprenderlo”, afirmó.
La Triple Corona es el evento más importante del año y el Presidente de la AAP está muy entusiasmado. Es una renovación en cuanto al espectáculo tanto dentro como fuera de las canchas y a su manejo ya que desde la Asociación están coordinando los 3 torneos (Tortugas, Hurlingham y Palermo). “Este año tenemos una expectativa muy grande de tener más audiencia, equipos nuevos y mayor incertidumbre de los ganadores. Creo que va a ser espectacular y por ahora viene todo muy bien”, concluyó.