Por Agroempresario.com
Profertil es la mayor empresa de fertilizantes del país y única fabricante argentina de urea granulada. Ubicada en el polo petroquímico de Bahía Blanca, en el sur de la provincia de Buenos Aires, la compañía proveedora de insumos para el agro inaugurada hace 20 años, inició un camino hacia la sustentabilidad. Agroempresario.com conversó con Marcelo Bertolino sobre las metas de triple impacto de la firma y los desafíos para el desarrollo de una agricultura sustentable.
- En el año de su 20º aniversario, la compañía presentó la décima edición de su Reporte de Sustentabilidad, un documento que detalla las acciones vinculadas al balance social, económico y ambiental. ¿Qué nos podés contar sobre este 10º Reporte de Sustentabilidad de Profertil Agro?
De los 20 años que cumple Profertil, el Reporte de Sustentabilidad cumple 10 años de vida. Se trata de un proceso que venimos realizando todos los años en forma consecutiva desde el área institucional coordinando y trabajando conjuntamente con todas las otras áreas que proveen la información para la elaboración de un documento que sirve para conformar un diálogo horizontal con los públicos de interés. También conlleva un proceso de construcción que permite tomar, una vez lanzado el reporte, un diálogo profundo con cada uno de estos públicos y tomando la consideración de los mismos. Eso sirve para mejorar la gestión año tras año de la empresa.
Creemos que la información más significativa de este reporte es que el 60% de energía de la planta de Profertil en Bahía Blanca ya es de origen renovable. Se trata de un gran hito producto de un convenio que tenemos con YPF Luz, el más largo de este tipo en Argentina a veinte años. YPF nos provee la energía desde el Parque Eólico Los Teros.
Otro logro para destacar de este reporte es que el año pasado fuimos declarados por el Estado Nacional como una actividad esencial para la producción de alimentos. Durante la pandemia producimos urea destinada a la cosecha de trigo y maíz, lo que impacta en la producción de alimentos del país.
En este sentido, tuvimos que trabajar en un proceso récord de adaptación de protocolos efectuando grandes cambios en el área de sistemas y seguridad e higiene de nuestra planta para garantizar su funcionamiento y el bienestar de nuestros empleados. Así, pudimos cumplir el objetivo de producción de urea, tan necesaria para el campo argentino logrando un récord de producción sostenible en medio de la pandemia.
Hoy lo más importante para Profertil es ser parte de la cadena agroalimentaria y dar un servicio al productor agropecuario en utilizar de forma racional la urea.
- ¿Cuáles son las prácticas sostenibles que vienen implementando?
Como compañía nos enfocamos en incorporar transversalmente a la sustentabilidad como modelo de gestión. Hoy las empresas ya no son más actores económicos sino que pasaron a ser actores sociales, organizaciones ciudadanas socialmente responsables, con derechos y obligaciones con las comunidades en las que están insertas. No solamente generamos riqueza sino que tenemos la obligación de ser parte de la conversación social.
Hoy como compañía, no sólo podés trabajar por la rentabilidad sino que debés trabajar sustentablemente en toda la cadena de valor (desde los proveedores a los clientes) y procesos de producción cuidando el medio ambiente y siendo económica y socialmente sustentable.
En lo que respecta a sustentabilidad social, tenemos una serie de programas sociales de vinculación con la comunidad como el programa “Visita”. Se trata de una iniciativa insigne para Profertil que permite que 2.000 personas por año puedan conocer nuestra planta de Ingeniero White, Bahía Blanca; uno de los complejos industriales más importantes del país y una de las cuatro plantas más grandes del mundo destinadas a la fabricación de urea.
La compañía también cuenta con programas sociales que apuntan a la generación de valor y capacidades instaladas. A través del programa “Creciendo en Comunidad” capacitamos en herramientas de gestión a las instituciones de tercer grado de la localidad de Ingeniero White, mientras que el programa “Mesa de Proyectos” se enfoca en la gestión de proyectos de impacto social por parte de estas instituciones. Con esta acción, durante el 2020 pusimos en valor distintas plazas locales y, junto a diversas organizaciones sociales, destinamos fondos para la asistencia alimentaria de trabajadores independientes durante la pandemia.
Por otro lado, la empresa se puso a disposición de las autoridades sanitarias de Bahía Blanca trabajando “codo a codo” con la municipalidad para la donación de equipos e incorporación de tecnología a los hospitales durante la pandemia. En este sentido, creo que Profertil estuvo a la altura de una situación crítica e importante para poder ayudar a la comunidad que nos rodea.
- ¿Cuáles son los objetivos sustentables a futuro de la compañía?
Sin duda estamos en un mundo más complejo donde los paradigmas de la industria y de los clientes cambiaron. Asumiendo que las empresas debemos contribuir a producir de una manera más sustentable, con nuestro gerente general a la cabeza (Federico Veller) armamos una estrategia de sustentabilidad 2030 con metas al 2025. La misma incluye la profundización de las Buenas Prácticas de manejo de los cultivos (trigo y maíz); ponerlas a disposición y trabajar junto al productor agropecuario.
Además de esto, el plan supone la reducción de un 5% el consumo del agua de la planta junto con la medición y trazabilidad precisa de nuestra huella de carbono para la disminución del en el medio ambiente.
Desde hace dos años Profertil comenzó a trabajar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU entendiendo que la sostenibilidad sea una gestión permanente en Profertil y que sea parte de la gestión de acá hacia el futuro.
Se estima que para el 2050 seamos 9 mil millones de habitantes con una superficie cultivable de sólo el 3% de la tierra. El fertilizante juega un papel clave en la producción de alimentos sanos y nutritivos, y estamos conscientes de eso; no solamente debemos contribuir a la cadena alimentaria del mundo sino que debemos ayudar a que esa producción sea lo más sostenible posible.