El ingeniero Juan Borús, subgerente de Sistemas de Información y Alerta Hidrológico del Instituto Nacional del Agua (INA), expresó su opinión sobre la situación del río Paraná para el 2022.
Durante su disertación en el Foro Internacional “La Hidrovía en bajante, Futuro 2030”, explicó que en la región hay una gran incertidumbre climática hace aproximadamente 20 años, lo que dificulta la capacidad de prospección.
“En lo que hace al pronóstico, la trazabilidad permite hablar hasta el 31 de marzo. En gran medida se aplica parte de la interpretación de lo que es la tendencia climática, que a medida que uno va mirando más adelante amplía el margen de error”, manifestó Borús.
En este marco, aseveró que según su apreciación personal se espera niveles en el río Paraná para el otoño del 2022, llegando a medir cerca de 0,20 centímetros sobre el cero de la escala.
Además, subrayó que el INA fue creado en 1983 debido a una gran crecida que ocasionó el fenómeno del Niño, que la región sufrió fuertemente, pero muy pocas veces debieron tratar bajantes como la que se está viviendo.
“Desde ese momento, tuvimos que atender muchas crecidas y muy pocas bajantes significativas. La actual nos ha modificado la manera de actuar, porque tiene escasos antecedentes en la historia registrada desde 1884, cuando la Bolsa de Comercio de Rosario puso la escala en el Puerto de esa ciudad”, concluyó.