Por Agroempresario.com
Haras el Potrillo se dedica a la cría, doma y venta de caballos Cuarto de Milla. Cuando Alvise Sagramoso tenía sólo 13 años, su madre y su abuela le obsequiaron 10 yeguas mestizas y algunas cruzas de polo. “Comencé con un objetivo, criar caballos lindos y funcionales, sobre todo para las pruebas de velocidad y trabajo con ganado”, recuerda Sagramoso.
En el año 2003, compró su primer padrillo, el famoso Pepo- Elle Jay Kingstone (DF Kingfield x Elle Jay Ellegant Peppy x Laurel Peppy), un alazán patas blancas.
A través de los años fue probando las crías y entendiendo que no sólo era importante contar con un buen padrillo sino también una buena madre.
Al tener diferentes madres en cuanto a carácter y raza, los resultados eran distintos. A partir de ese momento, comenzó a seleccionar las mejores madres y al mismo tiempo sus hijas.
En el año 2011, vendió su primer padrillo y en el 2012 compró otro llamado Little Pepy Wimpinic. Con el tiempo sumó otros tres padrillos nuevos con genética de primer nivel y probados funcionalmente. Sus nombres: Ckw Genuine Rooster, Play To Win Wimpy y Ckw Smart Bar.
- ¿Por qué eligieron la raza cuarto de milla?
Es la raza más versátil y su temperamento tranquilo, fácil de manejar, inteligentes y muy dóciles. Tienen muchas cualidades que es difícil encontrar en otras razas.
Además de su belleza racial y morfología ideal para el trabajo con hacienda y pruebas de velocidad como tambores.
- ¿Qué diferencias encontrás en relación a otras razas?
Básicamente en su morfología y temperamento. Son caballos que sirven para distintas disciplinas; ya sea trabajo con vacas, pruebas de velocidad como barriles y estacas, pruebas técnicas como la rienda y Western Pleasure. El temperamento que los hace fáciles de domar.
-¿Cómo está compuesto el planteo productivo?
Actualmente contamos con 3 padrillos, una manada propia de 35 yeguas madres, 15 potrancas de recría y una buena cantidad de caballos mansos lindos y funcionales que usamos para trabajar con hacienda.
Tenemos alrededor de 25 nacimientos por año: un 20% se vende al destete, un 50% se vende a los 2 y 3 años y generalmente un 30% se doma en el haras para venta de caballos mansos, y en caso de las mejores hembras después de doma pasan a madres.
-¿Cómo realizan el manejo reproductivo?
En este momento 3 padrillos y 35 yeguas madres. Damos servicio a mano, es decir, le asignamos un padrillo a cada yegua.
-¿Dónde y cómo realizan la comercialización?
Un 80% de manera particular a través de redes sociales y boca a boca. El resto, generalmente seleccionado va a remate.
-¿Cómo ves la situación actual del sector equino?
En general muy bien. Hay muchas actividades relacionadas con el caballo, sobre todo competencias donde hay premios en dinero.
La raza cuarto de milla en particular, ha crecido muchísimo en los últimos años, sobre todo durante la pandemia.
La gente de la ciudad empezó a migrar hacia el interior y disfrutar de las vacaciones en los campos. Aparecieron nuevos criadores y usuarios.