El productor agropecuario Diego Pascuale, oriundo de Santa Fe, manifestó su sensación y expectativas de la marcha autoconvocada del próximo 23 de abril.
El campo se une al reclamo del pueblo. ¿Qué significado tiene?
Estamos hartos los que producimos, los que generamos, los que nos levantamos temprano a la mañana a trabajar y pagamos impuestos que no sabemos a dónde van.
El campo, desde 2001 hasta aquí, le proporcionó a los gobiernos U$S300.000 millones, tamaño exacto de la deuda externa; y se la despilfarraron en políticas sociales que dan como resultado un 50% de pobreza.
El reclamo es el mismo: basta de robarnos, basta de impuestos, queremos trabajar libremente.
¿Qué expectativas tienen de la convocatoria del 23 de abril?
Nosotros no somos especialistas en organizar estos eventos pero creemos que hay que hacer cosas diferentes. Casi nunca en la historia se fue a Buenos Aires, casi nunca el campo desembarcó en Capital.
En cuanto a la convocatoria, no sabemos porque no llevamos micros de gente, no contratamos a nadie. La gente que vaya es de trabajo e irá pacíficamente para decirle basta a un gobierno dictatorial que nos está llevando directamente a Cuba o Venezuela.
Que la gente vaya convencida de que vamos a frenar esto.
¿Cuánto más puede aguantar un productor con estas políticas agropecuarias donde faltan insumos, hay una inflación sin techo y cuesta encontrar gasoil?
El productor hoy en día subsiste; el que puede. Este año, por las condiciones climáticas, se van a llevar a un montón de productores puestos. No sólo de soja, maíz y trigo, no sólo ganaderos, sino también las economías regionales que están totalmente destruidas por el desdoblamiento cambiario.
En un momento donde el mundo necesita alimentos, nosotros podemos generarlos y duplicar la producción; tenemos que hacer economía, agricultura y ganadería de subsistencia.
No se ponen los fertilizantes que se tienen que poner, no se compra tecnología porque no tenemos acceso y, si lo tuviéramos, no tenemos capacidad económica. Es una economía de subsistencia.