El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, presentó en Chaco la primera variedad de algodón con fibras extra largas desarrollada íntegramente en la Argentina por el equipo de investigación de la Estación Experimental del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de la ciudad de Sáenz Peña. Estuvo acompañado por el gobernador Jorge Capitanich y el titular del INTA, Mariano Garmendia.
"Ponemos el desarrollo científico al servicio de nuestros productores", afirmó Julián Domínguez durante el acto.
Además, expresó que "el INTA es un emblema de la soberanía científica, que ha construido un escenario de un espacio común entre productores, entidades y Estado, promoviendo el desarrollo científico-tecnológico y ese es un capital que tiene la institucionalidad".
"En este caso logró equiparar la productividad y la calidad mediante el mejoramiento genético en el cultivo del algodón", continuó.
En relación a la nueva variedad de algodón, el titular de la cartera agropecuaria explicó que "se destaca por su fibra fina y resistente, cuyo largo supera los 32 milímetros". Y agregó: "Es un factor clave que permitirá sustituir importaciones, disminuir costos y producir prendas de calidad con potencial de exportación".
Para una segunda etapa del proyecto se apunta a desarrollar la primera prenda con esta nueva variedad, mediante tecnología y con códigos QR. "Proyectamos poder brindar toda la información desde la semilla hasta la prenda terminada que hoy demandan los consumidores en muchas cadenas, incluso en la industria textil", adelantó el ministro Julián Domínguez.
"Este es un hecho muy importante, un nuevo evento biotecnológico que se produjo acá en nuestra querida Provincia del Chaco. Hay que estar atento a las señales que vienen del futuro. La historia nos ofrece una oportunidad. Este es el camino", completó el ministro.
En tanto, Jorge Capitanich afirmó: "Hoy es un gran día para el Chaco y para la Argentina porque el trabajo cooperativo, mancomunado, el esfuerzo de trabajadores, empresarios, productores, de instituciones, dan fruto. Esto arrancó en 2005 con una ley y un desarrollo que nos permitió ir cumpliendo metas. Y empezamos el camino para ser una variedad genética, reconocida, con capacidad de comercialización a nivel nacional e internacional".
Por otro lado, el investigador del INTA Sáenz Peña, Chaco, Mauricio Tcach, detalló que "esto es un desarrollo inédito para la Argentina". Y añadió: "Estas fibras sólo se producen en Egipto y Perú y resisten a las dos principales enfermedades que afectan al cultivo, lo que reduce la dependencia y uso de insumos químicos, lo que, a su vez, minimiza el impacto ambiental".
Participaron también del acto el ministro de Industria, Producción y Empleo provincial, Sebastián Lifton, la vicegobernadora Analía Rach Quiroga y el intendente de Sáenz Peña, Bruno Cipolini.
También estuvieron el subsecretario de Agricultura, Delfo Buchaillot; de Economías Regionales, Guillermo Martini; el Secretario de Relaciones Institucionales, Jorge Solmi; el titular de la DIPROSE, Gervasio Bozzano; y la directora Regional del INTA Chaco Formosa, Diana Piedra.
Firma de Convenio: Con el fin de impulsar la investigación y potenciar la producción de la nueva variedad a campo, el INTA firmó un convenio con las empresas nacionales Halgon SAS y Pato Pampa que apunta a producir esta fibra extra larga y poder desarrollar líneas genéticas.
La variedad de algodón Gossypium hrsutum L. produce el 95 % de la fibra de algodón del mundo. De acuerdo con la longitud de la fibra de algodón, se puede clasificar en corta, media, larga y extra larga. La corta mide menos de 25,1 milímetros (mm), la media oscila entre 25,1 y 27,9 mm, la larga es entre 28,1 y 32 mm y la extra larga es mayor a los 32 mm.
Las fibras más largas, finas y resistentes conocidas y usadas hasta el momento por la industria nacional para confeccionar prendas es la Gossipium barbadense L. y se importa de Perú.
Desde hace más de 70 años, el INTA impulsa el mejoramiento genético en algodón, de la mano de un banco de germoplasma que cuenta con 800 variedades de todo el mundo y 300 líneas genéticas mejoradas por diversas técnicas: convencional, muta-génesis y biotecnología.
Así, con el objetivo de lograr una producción nacional de variedades con fibras extra largas, el INTA orientó su selección y evaluación de líneas genéticas y obtuvo la línea experimental SP 21. La difusión de este tipo de fibra es inédita en la Argentina y toma un mayor valor gracias al acuerdo público-privado que posibilita el desarrollo del proyecto.
En paralelo, se evalúan 312 líneas mejoradas y se genera nuevos conocimientos de manejo y la búsqueda de una mejor expresión de la nueva genética. Esta significativa adopción de los cultivares desarrollados en INTA por parte de sector productivo, confirma la acertada respuesta de los planes de investigación llevados adelante en el Programa Nacional de Algodón, mediante la creación y difusión de cultivares de origen nacional.
Más tarde, Domínguez y Capitanich arribaron a la localidad de Machagai, donde participaron de la inauguración de las obras en la planta de secado industrial de madera y de la nueva fábrica de tableros alistonados finger joint, que fue financiada por el gobierno nacional en conjunto con la Provincia del Chaco.
Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación