Carlos Banacloy: “Somos un gobierno con continuidad que trata de mejorar sus políticas públicas”

Por Agroempresario.com

El ministro de Producción y Agroindustria de Río Negro brindó una entrevista exclusiva a Agroempresario.com en la que se refirió a las líneas de trabajo de la cartera y a los principales desafíos que enfrentan las distintas producciones de la provincia.

-¿Cómo evaluaría la situación del sector ganadero en Río Negro? ¿Qué herramientas se están implementando para incentivar al sector?

El sector ganadero de la provincia es un sector que viene creciendo a partir de esta validación del estatus sanitario que permitió cambiar la matriz ganadera. Básicamente se producía terneros en el secano y se comercializaba todo ese stock al norte de la barrera del Río Colorado, para que esos animales se terminen en La Pampa o Provincia de Buenos Aires. Demandó mucho tiempo generar una estructura de vientres. Hoy, cómo no se pueden ingresar madres del otro lado de la barrera, tenemos que generar nuestra propia genética. 

La nueva matriz parte del desarrollo de cabañas de toda la Patagonia en engorde y, en consecuencia, la producción de granos dentro de Río Negro, una provincia que representa el límite entre la estepa y la Pampa Húmeda. Hoy contamos con el mayor stock de vientres de la región y esto es un incremento constante pero con una demanda insatisfecha que es el consumo interno. Aún no se ve reflejado el crecimiento de en el stock ganadero en las exportaciones, primero porque como todos sabemos, se necesita una macroeconomía que permita que se acompañe esa exportación, y por otro lado tenemos una demanda local insatisfecha con precios relativamente altos así que toda esa comercialización se traslada al mercado doméstico. 

Sí vemos un cambio en la matriz con certificaciones muy importantes que permiten esto y hoy el gran desafío es incentivar el gordo, el novillo de exportación que hoy está insatisfecho. 

Hay una matriz muy grande en los Valles Chicos que tiene los dotes para hacer reproducciones intensivas. Pensemos en el Alto Valle de Río Negro con peras y manzanas y hoy estamos viendo maíz y alfalfa, algo impensado años atrás. Si bien lo veíamos en el Valle Medio donde convive mucho más la agricultura con la ganadería, esto se va extendiendo. Tenemos un número importante de área de maíz que se transforma en kilo vivo, la provincia ha tomado este incentivo desde hace 5 años con financiamientos para forrajes y hoy vamos viendo esos resultados.

-En un marco de lucha contra el cambio climático, ¿qué políticas se están impulsando desde el gobierno provincial para contrarrestar los efectos de las contingencias climáticas como sequías, nevadas e incendios?

Somos un gobierno que viene con continuidad y a diferencia de lo que sucede en la política nacional con la lógica de echar culpas, tratamos de mejorar nuestras políticas públicas. Tenemos una mirada de que todos tenemos la posibilidad de mejorar, modificar y generar nuevas herramientas; tratando de tratar de tener un norte y horizonte con un plan de mediano plazo. 

Esto se inició hace más de 7 años cuando comenzamos a subsidiar completamente la malla antigranizo y el riego con goteo, algo impensado hace unos años cuando nos sobraba agua. En ese momento no parecía una política pública acertada y sin embargo los riesgos han ayudado. En este sentido, el crecimiento de la financiación se dio de manera exponencial. 

Este año perdimos el 30% de la producción de heladas. Cada kilo de fruta multiplica por 11, por 12 su valor en el andar. Todo ese andamiaje que genera un kilo de fruta, claramente visibiliza la importancia que tiene ese productor. Por lo cual, todo lo referido a la mitigación es un camino de ida que no consideramos sólo como emergencia. Históricamente compensábamos a través de un fondo de emergencia por granizo y hoy estamos abocados pura y exclusivamente a mitigar. 

Antes costaba convencer al productor pero hoy se están dando cuenta que este es el camino. Tenemos todo medido, en determinadas zonas tenemos un granizo cada 3 años y esto quiere decir que el 33% de lo que se produce se lo lleva el granizo, con lo cual no hay ningún tipo de información que no se tenga para tomar las medidas necesarias    

-El gobierno provincial apunta al trabajo conjunto con el campo para poner en valor la cadena rural. En términos coyunturales, ¿cuáles cree que son las condiciones necesarias para que la matriz productiva rionegrina continúe su proceso de crecimiento y diversificación?

Río Negro es una provincia chica, enorme de territorio pero con poca densidad poblacional. Tenemos cerca de 800.000 habitantes pero somos una provincia que produce un valor y un volumen muchísimo más importante de lo que podemos consumir. Por lo cual, contamos con una matriz exportadora de la mayoría de nuestros productos, concebidos para ser comercializados  al exterior. No obstante, para esto se necesita estabilidad macroeconómica. Este contexto de incertidumbre que se genera con el cierre de las exportaciones provoca desconcierto en el productor y hace cambiar la lógica del productor. A este marco, hay que sumarle el tipo de cambio y un nivel de inflación mensual. Lo primordial es tener una economía estable, con cierta previsibilidad y con una macro en el que el productor pueda evaluar qué produce a mediano plazo y no dude en la exportación. Necesitamos una macroeconomía previsible para un mercado exportador. 

Hace unas semanas la Gobernadora Arabela Carreras anunció un programa de fondo para regularizar la propiedad de la tierra en el campo rionegrino, ¿cuál es su opinión sobre esta iniciativa que busca fortalecer la ruralidad en la provincia? 

Río Negro es una provincia con un territorio enorme y gran parte de este ha tenido durante muchos años un cambio en la tenencia precaria. Las tierras van pasando de generación en generación sin poder regularizarse y careciendo de acceso a políticas públicas de desarrollo humano y agricultura familiar. En el mismo sentido, para que ese productor pueda alquilar el campo necesita contar con una habilitación, de lo contrario, estos quedan abandonados y con plagas que compiten automáticamente con el pequeño productor que queda aislado dentro de su predio. Esta era una medida necesaria y muy solicitada dentro del sector y el Estado debe ser consciente que tiene que generar políticas públicas para lo que sea.