El Gobernador fue recibido por el intendente -en uso de licencia- Héctor Delahaye y la viceintendenta a cargo del Ejecutivo, Adela Weigum. También participaron del acto integrantes del gabinete provincial; los diputados nacionales Hernán Pérez Araujo y Varinia Marín, y el diputado provincial Espartaco Marín.
“Es una enorme alegría estar en Anguil” dijo Ziliotto y afirmó que “salir a recorrer la Provincia es el cable a tierra que tenemos. Entender las necesidades a partir de una visión propia nos permite volver con respuestas y a rendir cuentas”.
“La vivienda propia es una enorme demanda de pampeanas y pampeanos. Es deber de un Estado presente facilitar el acceso a esos derechos. Es, quizá, el acto político por excelencia, que tiene que ver con la justicia social. Porque el acceso a una vivienda propia es otorgar dignidad”.
Por eso destacó que la construcción de viviendas “es una de las principales políticas públicas de los gobiernos justicialistas de la provincia de La Pampa”.
Ziliotto analizó que “en esta gestión retomamos una senda que nunca debimos dejar de lado. Hoy tenemos la decisión de continuar haciendo viviendas en cada rincón de La Pampa y contamos con un fuerte acompañamiento de un Gobierno nacional con el cual compartimos ideología. Vamos saliendo de esa larga noche de la gestión nacional anterior, que sólo tuvo para La Pampa una mirada despectiva”.
“No nos trató bien el gobierno anterior a los pampeanos -aseguró el mandatario-, más aún a los que necesitaban viviendas. Sólo se nos asignaron 63”.
“Por eso -continuó- tomamos la decisión de profundizar un programa de Gobierno. Fue Carlos Verna, en 2017, quien se hizo cargo de ese vacío y, junto a intendentas e intendentes, emprendió este camino. Hoy, no sólo hemos profundizado el programa Mi Casa 1, sino que estamos entregando y sorteando operatorias del programa Mi Casa 2, y pusimos en marcha Mi Casa 3, un programa que mira a todas y todos los pampeanos de la misma manera”.
“Miramos la necesidad y no el signo político de quien esté a cargo del Gobierno municipal” afirmó el Gobernador, al tiempo que aseguró que “no vamos a abandonar la construcción de viviendas”.
Y confirmó que los eslogans que dicen: ‘vivienda que se termina, nueva vivienda que comienza; barrio que se termina, barrio que comienza’; se transforman en una realidad. Por eso hemos decidido que Anguil tenga, en poco tiempo, 35 viviendas más. Si uno lo compara con la demanda, son 124 familias que esperan, quizá no son muchas, pero confiamos en que este sistema que es una construcción colectiva, solidaria y virtuosa; Cuantas más viviendas hacemos y mayor responsabilidad en el pago de la cuota, también es más la cantidad de viviendas que haremos”.
“También decidimos darle un marco de absoluta transparencia a la adjudicación de viviendas. Es por eso -detalló Ziliotto- que ante la imposibilidad de dar respuestas a todas y todos, sabiendo que la necesidad y el mérito de cada familia se choca, a veces, con la cantidad de viviendas; instauramos los sorteos. No nos vamos a arrogar la decisión de decir a quién le toca una vivienda y a quién no. Son recursos públicos, de las y los pampeanos”.
“Esas nuevas 35 viviendas que construiremos, como lo venimos haciendo en otras localidades, también se adjudicarán por sorteo, en igualdad de condiciones, para que nadie se sienta excluido o discriminado. Estamos otorgando derechos, no podemos tener favoritismos”.
El Gobernador agradeció el trabajo conjunto con el municipio de Anguil y lo hizo extensivo a todos los municipios pampeanos, al tiempo que se hizo eco de las palabras de una de las adjudicatarias para enfatizar que “hoy termina la etapa de reclamar un derecho y comienza la etapa de la responsabilidad con sus vecinos, porque cada cuota paga significa la esperanza y la certeza para otras familias de que tendrán vivienda. Esto hará posible que cada barrio sea una comunidad y cada casa sea un hogar”.
La viceintendenta Weigum afirmó “a partir de hoy, estas familias anguilenses pueden pensar en un futuro distinto. Hoy Anguil celebra con ellas. Estas doce viviendas son la muestra de que el trabajo mancomunado, los esfuerzos compartidos y los objetivos claros permiten estos logros”.
Aclaró que “no es fácil para una comunidad como la nuestra asumir estos desafíos. Estuvo la decisión política de hacerlo y la voluntad de concretarlo”.
“La vivienda solidaria es uno de los mejores ejemplos de equidad en nuestra Provincia”, así lo entendió Mercedes, una de las adjudicatarias, al relatar que el día que les avisaron que accedería a su vivienda sintió “una emoción inexplicable, combinada de lágrimas y risas. Después de ilusionarnos durante años, el sueño se concreta y se respira aliviada porque se tiene la certeza de poder darle a nuestros hijos un techo seguro, estable y digno”.
También agradeció a los presentes y expresó que “las doce familias nos comprometemos a cumplir nuestras obligaciones para que otras familias puedan cumplir este sueño”.