En total, durante los tres fines de semana turísticos de abril - este último con el día del trabajador, el extra largo de Semana Santa y el fin de semana de la procesión mariana- se registraron 62.578 pernoctes y un impacto económico sobre la cadena de valor del turismo de 667 millones de pesos.
Este último fin de semana largo, que coincide con el Día del Trabajador, la provincia registró una ocupación hotelera del 61%. El relevamiento realizado desde la Dirección de Calidad Turística de la Secretaría de Gestión Turística arrojó un total de 17.487 pernoctes, con un promedio de estadía de 2 noches. Eso a razón de un gasto diario promedio de $10.650 determina un impacto económico de $186 millones de pesos, distribuidos a lo largo de toda la cadena de valor del sector turístico.
De ese promedio provincial del 61% de ocupación hotelera, sobresalen algunos destinos que fueron preferidos por los turistas. El Rodeo tuvo ocupación plena, Pomán, Tinogasta y Antofagasta de la Sierra un 95%, El Alto y Santa Rosa un 87%, Fiambalá un 85%, La Puerta y Paclín un 80%, Andalgalá un 78% y Aconquija un 75% de OH.
El fin de semana de la procesión de la Virgen del Valle, si bien no fue largo, tuvo movimiento turístico y buena ocupación hotelera motivada por la festividad religiosa. El promedio provincial fue del 60%, con 17.084 pernoctes y dos días de estadía promedio, arrojando un impacto económico de 181 millones de pesos.
Previamente, el fin de semana largo de Semana Santa Catamarca había alcanzado un 77% promedio provincial en ocupación hotelera, con destinos como Antofagasta de la Sierra, El Rodeo, Las Juntas, El Alto, Fiambalá y Tinogasta con ocupación plena.
Ese finde extra largo de abril dejó un impacto económico de 300 millones de pesos, a partir de los 28.007 pernoctes registrados.
El acumulado de abril demuestra cómo la demanda turística comenzó a ser sostenida, respondiendo a la importante inversión en materia promocional y a las distintas propuestas que los municipios generan para atraer a los visitantes.