El gobernador, junto al intendente de Fray Luis Beltrán, Mariano Cominelli, recorrió las obras del intercambiador de acceso de esa ciudad a la autopista Rosario–Santa Fe, las cuales concluyeron, y solo restan tareas de demarcaciones y señalización.
Los trabajos, que cuentan con un presupuesto actualizado que supera los 2.000 millones de pesos, están a cargo de la UTE Rovial SA y Brajkovic SA, y se centran en la construcción de dos ramas de ingreso y otras dos de egreso en el puente existente, además de la pavimentación de la calle Luciano Molinas, que será la vía de acceso a la localidad en sentido oeste-este.
“Es una obra que priorizamos desde el primer día, y que teníamos que trabajar juntos. Y la decisión fue una obra de estas características, no solamente por el impacto que produce en Beltrán, sino como una de las infraestructuras que mejora toda la región”, dijo Perotti, acompañado por el secretario de Políticas de Inclusión y Desarrollo Territorial, Fernando Mazziotta.
“Poder tener el acceso le va a dar a Beltrán un antes y un después. Va a ser una infraestructura que le genera, no solamente mayor seguridad vial, sino que va a impactar en localizaciones importantes para la actividad productiva de la ciudad y de toda la región”, pronosticó el gobernador.
Y detalló: “Es una obra que tiene la parte civil terminada; queda la instancia final donde entra el detalle de revisión, incorporación de los guardarrail, cartelería, señalización, y el ajuste final sobre la iluminación para el acceso”.
“Estamos en los plazos finales, con el grueso de la inversión ya realizada, y nos alegra profundamente estar en este grado de avance de una obra importante porque sentimos que estamos cumpliendo con Mariano, cumpliendo con todo Beltrán, con un reclamo histórico, y de alta importancia, que impacta positivamente en una ciudad y en una región”, cerró el gobernador.
A su turno, Cominelli recordó que “se presentaron miles de proyectos que eran nada más que papelitos. Y cuando me toca asumir como intendente no era más que eso. Se necesitó la decisión del gobernador para priorizar nuestra ciudad y la región, para que se convierta en una realidad”.
Y sumó: “Va a ser histórico, no solamente para la circulación y el acceso a la autopista, sino para el desarrollo comercial e industrial de nuestra ciudad”.
La obra, contempló el fresado y la repavimentación de ambas calzadas de la Autopista en 500 metros hacia cada lado del puente; reparación de alas, estribos, barandas y losas de acceso al puente; la colocación de defensas metálicas en las nuevas calzadas y la iluminación de los ramales y la calle Luciano Molinas con tecnología LED.
En tanto, en la pavimentación de la calle Luciano Molinas (perpendicular a la Autopista) se trabajó en unos 700 metros hasta las cercanías a la Avenida Interurbana que conecta San Lorenzo, Fray Luis Beltrán y Capitán Bermúdez, dónde se ejecutó una calzada de hormigón con cordones integrales y nuevo sistema de desagües.
Más tarde, el gobernador recorrió la obra de iluminación LED entre los kilómetros 0 y 22 de la traza que conecta a Rosario con la capital provincial, donde se colocaron 897 columnas, principalmente en el cantero central y 39 kilómetros de barandas metálicas de defensa en ambos sentidos de circulación con la finalidad de mejorar la seguridad vial.