La movilidad de la flota local entre puertos de la provincia de Buenos Aires vuelve a estar cuestionada como otros años e incluso en otras latitudes. El foco de resistencia esta vez apareció en puerto de General Lavalle, en medio de la temporada de corvina.
Un grupo de pescadores locales mantiene una férrea posición de no dejar atracar barcos de otros puertos que vayan a hacer la temporada de corvina, amenazando protestar frente al municipio local o sobre la ruta 11.
Los manifestantes esgrimen que la “poca historia” en la pesquería de algunos barcos y, sobre todo, el tamaño de sus cascos excede la capacidad de respuesta del recurso. “Esto nos sacará trabajo el resto del año”, expuso el vocero de unos pescadores lugareños de ese puerto.
Lo cierto es que los buques cuestionados cuentan, como cada año, con el aval otorgado por la Dirección de Pesca de la Provincia para operar desde General Lavalle; aunque en estos casos la Autoridad de Aplicación entrega los permisos acotados a la zafra.
Particularmente de cara a la pesca comercial y ante la demanda puntual de compradores en la zona que poco se ven en los muelles de Mar del Plata, la idea inicial de algunas embarcaciones costeras amarillas con permiso de pesca provincial era operar desde el puerto de Gral.Lavalle, pero las circunstancias hacen que privilegien la paz social ante tal situación. La historia reciente da lugar a una decena de embarcaciones que iban a operar la zona, pero hoy, el crecimiento de la flota artesanal en la zona, más los costeros locales fomentan una localía que evita la llegada de otras embarcaciones.
Mientras tanto, entre los armadores afectados prevalece la voluntad de permanecer en Lavalle para hacer valer su posición. “No pienso mover el barco hasta que pueda trabajar”, esgrimió el titular de una embarcación afectada ante la consulta de este medio.
Una situación de similares características, vale recordarlo, se dio hace algunos años cuando una pareja de barcos locales intentó trabajar sobre “El Rincón” teniendo como base el puerto de Bahía Blanca; pero la oposición judicial ejercida desde los “artesanales” de Monte Hermoso lo impidió.
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