Esta plaga, que no se encuentra presente en Chile, representa un riesgo para la agricultura, el medio ambiente y la salud humana debido a su capacidad para portar nematodos peligrosos.
El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Chile ha emitido una alerta fitosanitaria después de confirmar la presencia de caracoles gigantes africanos (Lissachatina fulica) en el país. Este caracol es una plaga que no es nativa de Chile y su introducción representa un riesgo significativo para la agricultura, el medio ambiente y la salud humana.
El primer ejemplar de caracol gigante africano se encontró en plantas ornamentales de ingreso ilegal en la región de Tarapacá. Posteriormente, se detectó otro ejemplar en la región de Arica y Parinacota, después de que turistas trajeran una concha como recuerdo desde un viaje a Brasil.
Además de ser una amenaza para la agricultura y el medio ambiente, el SAG ha alertado sobre la posibilidad de que estos caracoles puedan portar nematodos peligrosos que representen un riesgo para la salud de las personas.
Ante esta situación, el SAG hace un llamado a la ciudadanía para evitar la compra de productos vegetales en el comercio ilegal y reportar cualquier avistamiento de este caracol invasor. Lissachatina fulica es considerado una de las 100 especies exóticas invasoras más peligrosas del mundo, y su introducción en Chile podría tener graves consecuencias para la biodiversidad y los ecosistemas locales.
El caracol gigante africano es una especie omnívora con un apetito voraz, lo que podría causar daños significativos en las plantas cultivadas. Es una especie hermafrodita que puede alcanzar altas poblaciones y vivir hasta 10 años.
Además de sus efectos devastadores en la agricultura, el caracol gigante africano también puede tener un impacto negativo en el medio ambiente al competir por hábitats y alimentos con otras especies nativas. Su capacidad para desplazar poblaciones de caracoles autóctonos y depredar la flora nativa es motivo de preocupación para las autoridades.
El SAG ha enfatizado la importancia de evitar el ingreso de caracoles a Chile, ya que representan un riesgo no solo como plaga silvoagropecuaria, sino también por la posibilidad de transmitir enfermedades peligrosas a las personas.
Ante la sospecha de la presencia de caracoles gigantes africanos en el país, se insta a la ciudadanía a no manipularlos y a informar inmediatamente al SAG a través de su call center al 223451100 o enviando un correo electrónico a [email protected]. La colaboración ciudadana es fundamental para prevenir la propagación de esta peligrosa plaga en Chile.
Agrolatam