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Es igual o más nutritiva que la zanahora naranja convencional y el cultivo es igual de sencillo. Te contamos cosas particulares de esta variedad tan especial y además de dónde viene la zanahoria y su color naranja. ¡Tiene un componente histórico muy curioso!
Las zanahorias desarrolladas a partir de estos progenitores han estado con nosotros durante unos mil años pero las primeras eran duras, peludas y de color púrpura o negruzco. Allá por S. XVI, mejoradores de zanahorias holandeses desarrollaron la zanahoria naranja. Recuerda que el naranja es el color del país. Sus futbolistas visten de naranja. Pero y esto por qué. ¿Qué afán tendrían de cambiarle el color a una raíz comestible? La respuesta es: un patriotismo exacerbado.
Nos tenemos que remontar hasta más o menos el siglo XVI, siglo en el que España dominaba el mundo con reinados por ancho y largo del viejo continente, y Holanda estaba supeditada el dominio español. Y como cualquier dominio, llega un momento en que se resquebraja y se producen tensiones que llevan a revueltas, invasiones y guerras, en este caso la de los 80 años, desde 1568 hasta 1648 hasta que Holanda se independiza.
Y el líder de tales revueltas no es ni más ni menos que un tal Guillermo I de Orange – Nassau cuyo estandarte era una bandera con color naranja, que acabó siendo la base bandera de la de los Países Bajos.
Y habiendo ya zanahoria morada, deciden cambiarle el color al naranja
Y ahí tenemos a los agricultores y mejoradores de la época que dijeron, pues que la zanahoria sea naranja. Y así fue, convirtiendo tal modificación en el estándar de hoy en día. Hasta el propio Bugs Bunny come zanahorias naranjas, aunque las variedades blancas, amarillas, rojas, granates y púrpuras se anuncian en muchos catálogos de semillas y cada vez están teniendo más acogida. Y hoy tenemos ante nuestros ojos, la zanahoria morada.
Aunque te parezca atractiva, debes tener en cuenta que tienden a adquirir un color marrón menos atractivo cuando se cocinan y probablemente se utilicen mejor crudas en ensaladas donde su color destacará sobre todo lo demás.
Las zanahorias púrpuras tienen tantos nutrientes como sus primas-hermanas de color naranja, con una salvedad. Tienen tanta vitamina A como las zanahorias naranjas, pero también contienen antocianinas, esos compuestos que dan a las frutas y verduras de colores como los arándanos su estatus de súper alimentos.
Igual ahora te estarás preguntando que si el betacaroteno, que es el precursor de la vitamina A, es el que da ese tono naranja a la zanahoria… si la zanahoria morada no es naranja sino morada… entonces ¿dónde está ese contenido en vitamina A? ¡Pues es que la zanahoria morada no es morada toda ella!
Numerosos estudios han descubierto que los pigmentos de las zanahoria morada pueden mejorar la memoria, mejorar la visión, proteger contra los ataques cardíacos y proporcionar beneficios antiinflamatorios. En este que os dejamos aquí se evaluó el potencial antioxidante de las zanahorias moradas.
La mayoría de la gente sabe que las zanahorias son una buena fuente de vitamina A, que es importante para una visión saludable. De hecho, sólo se necesita una zanahoria de tamaño medio para cubrir todas las necesidades diarias de vitamina A. Las zanahorias también son ricas en potasio y son una fuente de cobre, B6 y magnesio. Aunque son bajas en calorías, las zanahorias son lo suficientemente dulces para ser fermentadas y puedes hacer un vino realmente colorido y con cierto grado alcohólico ¡en tu propia casa!
Lo más importante de cultivar zanahorias es tener un lecho bien preparado o un espacio en el jardín. A las zanahorias no les gustan las rocas o la tierra compactada. Si el suelo difculta su crecimiento, entonces se atrofiarán y deformarán. El mejor suelo es ligero y arenoso con un alto contenido de materia orgánica, y tal vez una pequeña cantidad de cenizas de madera para el potasio, y para contrarrestar cualquier exceso de acidez.
Cuidado con los abonados nitrogenados puede causar ramificaciones y raíces vellosas. Es muy diferente la materia orgánica disponible que el estiércol puro ya que lo primero está «procesado» por la actividad biológica del suelo y el estiércol tiene un contenido muy elevado en nitrógeno.
Lo bueno de plantar zanahorias es que se pueden plantar tan pronto como el suelo esté listo. Una vez que pongas las semillas, las heladas, la falta de horas de luz o la nieve no las molestará más mínimo.
La profundidad de siembra de la zanahoria morada es aproximadamente de 1 cm como máximo y un marco de 10 x 10 cm . Las semillas son muy pequeñas, pero la mayoría de ellas germinarán. Es mejor sembrar de más y luego realizar un aclareo. Como ya os comentamos en el cultivo de la zanahoria normal, se puede remojar la semilla y dejarla un par de días entre periódicos húmedos antes de plantarla. Aseguraremos un mejor porcentaje de germinación.
La tierra debe estar húmeda con asiduidad. Es un cultivo que requiere mucha agua.
Es raro ver algún daño significativo de insectos en el cultivo de zanahorias. Eso puede ser más preocupante para producciones a gran escala que en un huerto de autoconsumo. La podredumbre de la raíz negra, puede ser algo común. Es una enfermedad fúngica que se produce por la conjunción de demasiada humedad + temperaturas elevadas (por encima de 18-20ºC) + exceso de materia orgánica en el suelo. De ahí que tengamos que tener cuidado con los abonados. El resto de plagas y enfermedades son las habituales de la zanahoria normal y de otro muchos cultivos como pulgones, mosca de la zanahoria, Gusanos del alambre del género Agriotes spp., y algunos nematodos. Hongos como mildiu, oidio, alternaria… hay varias pero no es un cultivo tan tan delicado en un huerto como para que no se de con normalidad.
La cosecha de zanahorias puede hacerse a mano si el suelo está muy suelto, de lo contrario, una horca de jardín es la mejor opción para ahuecar y causará el menor daño a las raíces. Puedes saber cuando tus zanahorias están listas examinando las cabezas de las raíces, que estarán justo encima o debajo de la tierra. El dulzor de una zanahoria se ve potenciado por las temperaturas por debajo de 10ºC por lo que la recolección se puede dar durante el otoño y, dependiendo de lugares, incluso entrado el invierno.
Agromática
