Con miles de toneladas de piedra y tierra en movimiento, ya toma cuerpo la Doble Vía del Este, cuya primera etapa se está construyendo entre Rivadavia y Junín. A futuro, será la autopista de salida e ingreso de ambos departamentos y de San Martín al corredor bioceánico de la Ruta Nacional 7, no solo para sus residentes sino para la producción y el turismo.
Así lo comprobaron durante una recorrida por las obras el vicegobernador de la Provincia y futuro intendente de Junín, Mario Abed; el actual intendente de Junín, Héctor Ruiz, y sus pares de Rivadavia y San Martín, Miguel Ronco y Raúl Rufeil, y el administrador general de Vialidad Mendoza, Osvaldo Romagnoli.
Las máquinas y los operarios avanzan para concluir la base estabilizada donde se apoyará la futura autovía, que en este primer tramo se extenderá desde calle Falucho, en Rivadavia, hasta la Ruta Provincial 60, en Junín.
El vicegobernador Mario Abed calificó a la Doble Vía del Este como “la obra” de la región en las últimas décadas, por su importancia y dimensión. “Es una de las más grandes que se ha hecho en la región, por eso felicito a los tres intendentes por ponerse de acuerdo en encarar este proyecto junto a Vialidad provincial”, afirmó.
“Yo era intendente de Junín –continuó Abed– cuando ya planteamos la necesidad de la doble vía junto a Rivadavia y San Martín, en ese momento con distintos colores políticos, pero se pudo viabilizar cuando trabajamos en conjunto con la Dirección Provincial de Vialidad, porque esta obra está financiada netamente desde el Gobierno de provincia, con fondos propios y trabajando con tres intendentes que se pusieron de acuerdo”.
Abed resaltó además: “Esta salida rápida hacia la Ruta Nacional 7 que estamos construyendo permite que nuestra producción y hoy valga lo mismo que la producción de cualquiera de las grandes zonas industriales de Mendoza”.
Por su parte, el titular de la DPV, Osvaldo Romagnoli, detalló los trabajos que se están realizando en este momento: “Estamos en una etapa muy importante, porque es en la que se hace lo que no se puede apreciar una vez finalizada la obra” .
“Estamos trabajando –precisó– en todo el material que se incorpora para sanear el suelo, que tiene un nivel freático alto, por lo que se está agregando material granular, una cama de piedra, una geomembrana y una compactación especial que hace que esa napa se deprima para recibir la futura carga”.
Romagnoli recalcó que “esta autovía con sus colectoras va a permitir achicar los tiempos de desplazamiento entre Rivadavia y la Ruta Nacional 7 que hoy es de 40 minutos y con la Doble Vía del Este será solo de 15 minutos”.
A su turno, el intendente de Rivadavia, Miguel Ronco, afirmó que “la idea con esta obra era sacar a Rivadavia del aislamiento, que dejara de ser un pueblo terminal y que tuviésemos una entrada y una salida como corresponde, por la cantidad de vehículos que ya tenemos y porque ya tenemos 70.000 habitantes a quienes les estaba quedando muy incómoda la conexión con la Ruta Nacional 7”.
Finalmente, el intendente de Junín, Héctor Ruiz, señaló: “Es muy importante, porque es una obra que nos dará la posibilidad de crecer en el tiempo, desde lo turístico, desde la producción, desde lo urbano y, si no lo hacíamos de esta manera, en conjunto con la Provincia y con los intendentes, no había forma de hacerla”.
Ruiz recalcó que “la Doble Vía del Este no solo mejorará la transitabilidad sino que le dará un fuerte crecimiento a toda esta zona donde se está construyendo, que era el fondo de las propiedades rurales y que en breve se va a transformar en los frentes de esta autopista que va a quintuplicar el valor del metro cuadrado y permitirá la posibilidad de un fuerte crecimiento”.