Por Agroempresario.com
La Cumbre, en la provincia de Córdoba, se alza como un faro de producción sostenible en Argentina. Con su clima favorable y una tierra fértil, esta localidad ha deslumbrado con su diversidad de producciones que van desde la agricultura hasta la artesanía.
Los campos de La Cumbre son testigos de una agricultura diversificada. Desde los cultivos tradicionales como maíz y trigo hasta frutas finas como frambuesas y arándanos, la tierra aquí es un lienzo fértil para el cultivo. La ganadería también se destaca con la cría de ganado bovino y caprino, priorizando prácticas sustentables para preservar la calidad del suelo y el bienestar animal.
El encanto de La Cumbre va más allá de sus campos. El turismo rural ha florecido gracias a la oferta de alojamientos en estancias y actividades que conectan a los visitantes con la vida rural. La gastronomía, basada en productos locales, es una delicia para los paladares exigentes. Desde platos tradicionales hasta la incorporación de ingredientes frescos en la alta cocina, La Cumbre se enorgullece de su cocina auténtica y creativa.
Los artesanos locales han llevado la creatividad de La Cumbre a otro nivel. Con habilidades transmitidas de generación en generación, se producen artesanías únicas que representan la identidad de la región. Además, la producción cultural, como festivales y eventos artísticos, ha florecido, atrayendo tanto a residentes como a turistas.
El compromiso con la sostenibilidad es una piedra angular en la producción de La Cumbre. La implementación de prácticas agrícolas orgánicas, el uso eficiente del agua y la energía, así como el fomento de la economía circular, demuestran el enfoque progresista de la localidad hacia un desarrollo equilibrado.
La Cumbre, con su rica diversidad de producciones, no solo es un faro económico en la región, sino un ejemplo de cómo la producción sostenible puede llevar al crecimiento sin sacrificar el entorno.