Es que finalmente llegó el día en que los más de 120 equinos debieron abandonar el campo de Baradero donde vivían hace varios años en condiciones de semilibertad, luego de ser rescatados por los voluntarios.
A los miembros de la ACMA les gusta presentarse como “Cruzada por los caballos maltratados. Equipo especializado en rescate equino”. Y son quienes días atrás empezaron una nueva misión para encontrar un campo para seguir ayudando a estos animales que defienden.
Sin embargo, la organización sigue sin encontrar un campo para alojar a estos caballos de forma definitiva, que por mucho tiempo fueron víctima de maltrato. Por el momento, los animales podrán estar en un campo sobre la Ruta 2, en la localidad de Castelli, pero continua el pedido desesperado de un campo para ACMA, porque en este predio es una solución transitoria.
“Tenemos vida, tenemos fuerza, nos guía la necesidad de lograr cosas mejores y acá estamos juntos luchando por asegurarles el mejor de los futuras a aquellos caballos que estuvieron muerto en vida”, es otro pasaje del mensaje esperanzador de ACMA, que difundieron en redes sociales mientras comunicaban que seleccionaron este lugar porque al menos cumple con el imprescindible requisito de ser seguro.
Desde la ONG, hicieron énfasis en que el campo donde estuvieron hasta hoy, a pesar de estar mas cercano a la ciudad de Buenos Aires, no es una opción para darle resguardo a los caballos, porque además de no contar con las hectáreas necesarias, es un espacio para atender a los caballos con problemas de salud.
No obstante, los rescatistas siguen con el empeño de encontrar un campo propio, donde continuar la labor que desempeñan hace 14 años, que es la de proteger caballos que después de ser explotados y maltratados, fueron abandonados a su suerte.
Bicho de Campo