La Corporación Financiera Internacional (IFC) ha anunciado un importante respaldo financiero destinado a Drenik ND, una empresa destacada en la producción de papel tissue en Serbia. Este apoyo marca un hito en la transición del país hacia una economía más verde y sostenible.
La iniciativa, centrada en la construcción de una planta de cogeneración de biomasa en las proximidades de Belgrado, representa un paso significativo hacia adelante en términos de eficiencia energética y sostenibilidad ambiental.
Se espera que esta planta, ubicada en Krnjača y diseñada para generar 8 MW de electricidad y producir 16 toneladas de vapor por hora, utilice aproximadamente 12,45 toneladas de astillas de madera por hora, lo que equivale a unas 90.000 toneladas anuales.
Esta biomasa proviene de los propios bosques de Serbia, gestionados por la agencia de manejo forestal Srbijašume, y consiste en madera no comercial recolectada durante el mantenimiento forestal, la limpieza y el cuidado de espacios verdes públicos.
Este enfoque no solo resalta el valor de la energía renovable, sino que también muestra cómo los subproductos industriales y los recursos naturales pueden ser aprovechados en una economía circular.
El respaldo financiero de la IFC, que incluye un préstamo tipo A de 60 millones de euros y un paquete sindicado de 46 millones de euros, sienta las bases para este proyecto transformador. Sin embargo, el apoyo no se limita únicamente a la financiación; la IFC también se compromete a brindar servicios de asesoramiento a Drenik ND. Estos servicios están diseñados para mejorar la gobernanza corporativa de la empresa, así como sus sistemas de gestión ambiental y social.
Este enfoque integral subraya no solo el compromiso de la institución financiera con el fomento de prácticas industriales sostenibles, sino también la importancia de una sólida gobernanza corporativa y responsabilidad social en las operaciones comerciales modernas.
Este proyecto no solo representa una actualización industrial; es un hito significativo en la transición continua de Serbia hacia una economía baja en carbono. Tras la puesta en marcha de su primer sistema de cogeneración de biomasa en Boljevac en 2019, el país ha estado avanzando constantemente en sus capacidades de energía renovable. El proyecto de Drenik ND se erige como un faro de progreso, demostrando los beneficios tangibles de integrar prácticas sostenibles en el núcleo de las operaciones industriales.
Al aprovechar el potencial de la biomasa, Serbia no solo está abordando sus necesidades energéticas, sino que también está sentando un precedente en cuanto a cuidado del medio ambiente e innovación.
En un mundo que enfrenta los desafíos del cambio climático y la degradación ambiental, iniciativas como la planta de cogeneración de biomasa de Drenik ND ofrecen un destello de esperanza. Nos recuerdan el poder del esfuerzo colectivo, la innovación y el compromiso inquebrantable con un futuro más verde y sostenible.
A medida que este proyecto se desarrolle, sin duda inspirará a otras industrias y naciones a considerar cómo también pueden contribuir a la transición global hacia la energía renovable y la reducción de las huellas de carbono.
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