Si bien el contenido de los huevos es muy demandado por su valor nutricional, las cáscaras de huevo cuentan con un importante aporte de nutrientes que son eficientemente aprovechados por las plantas.
La cáscara de un huevo de gallina está formada por un 96% de carbonato de calcio: una de las mejores fuentes de este ecológicas de este nutriente para las plantas en macetas, jardines o huertas. Aunque no forman parte de nuestra dieta, las plantas extraen todos sus beneficios. A su vez, se les puede dar muchos otros usos.
Este recurso, además ecológico, ofrece la oportunidad de mejorar la salud de las plantas gracias a sus diferentes propiedades y usos.
A continuación, se enuncian algunos de los beneficios que este elemento tiene en las plantas para empezar a reciclar esa parte del huevo que casi siempre se desecha.
Combate las plagas: Para luchar contra los herbívoros, se suele esparcir trocitos pequeños de cascara de huevo alrededor de la zona del jardín o de la maceta que sufra ataques de alguna plaga de caracoles o babosas. Su acción defensiva reside en ayudar a crear una barrera que las babosas o caracoles evitarán ya que se pinchan y les molesta.
Fertilizante: Es una rica y económica fuente de calcio. Se debe triturar la cáscara y colocarla sobre el sustrato que se use como suelo para tu planta. Dado que el calcio es un nutriente esencial para el desarrollo de las plantas y su liberación en la tierra es bastante lenta, se puede añadir la cáscara para ayudar a que los cultivos a prevenir la podredumbre. Particularmente, ayuda a la floración de las rosas.
Reduce la acidez del suelo: Muchas plantas necesitan de un tipo de suelo específico para su crecimiento. Por ello, un método casero para controlar la acidez del suelo donde se encuentran las plantas es añadir cáscara de huevo molida. Se la debe agregar durante un periodo de tiempo prolongado para conseguir buenos resultados. El agua de los riegos facilitará la liberación de los componentes de las cáscaras en el suelo.
Compost casero: El agregado de restos de cáscara de huevo en la compostera enriquecerá el contenido de nutrientes y completo para tus plantas.
Semillero: Sin romperlas enteramente, pueden utilizarse como semillero. Solamente es necesario tener la mitad o algo más de la cáscara, realizarle un pequeño agujero en la parte inferior para ayudar al drenaje y se obtendrá un semillero totalmente ecológico.
Una forma de prepararla, es mediante trituración para hacer una infusión a base de este sustrato. Para ello se debe colocar seis cáscaras y llevarlas a ebullición en tres litros de agua. Con este agua de cáscara de huevo para las plantas se puede agregar calcio y otros minerales beneficiosos como el magnesio o el fósforo a tus plantas mediante algunos riegos.
Otra manera de prepararla es crear harina de cáscara de huevo. Este método requiere mayor precisión, pero asegura resultados positivos casi inmediatos en las plantas.
Se necesitarán al menos una docena de cáscaras para producir la harina. Deberán dejarse a secar a la sombra para evitar que pierdan el nitrógeno. Cuando estén secas, se tienen que colocar en una bolsa y luego machacarlas con la ayuda de un mortero de manera muy intensa o una piedra hasta que quede un polvo muy fino. Este material debe guardarse en un recipiente con tapa hasta su uso.
Para usarla, hay que añadir una o varias cucharadas de postre según el tamaño de la maceta durante unos 40 días aproximadamente. De esta forma, recibirán el aporte de calcio que necesitan.
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