Sebastián Malamud, gerente General de PLA by John Deere, recuerda que hace tres años, cuando todavía la pandemia de Covid-19 tenía sus últimos coletazos, el mercado de maquinaria agrícola vivía un presente soñado.
Al punto de que la demanda superaba las capacidades productivas, y la mayoría de las empresas del sector debía entregar los equipos con retraso.
Fue en ese entonces que la firma con base en Las Rosas (Santa Fe), y que desde hace seis años forma parte del gigante multinacional, se decidió a encarar un ambicioso proyecto de ampliación, con una inversión de U$S 15 millones.
Hoy, con un escenario radicalmente distinto, producto de un desplome de ventas que comenzó con la sequía del año pasado y que por ahora no tiene luz al final del túnel, fue cuando finalmente PLA by John Deere pudo inaugurar esa obra.
No obstante, son optimistas: “La agricultura está hecha de ciclos; ahora estamos en un ciclo de baja, cuando venga el de alta estaremos preparados. No va a estar ese cuello de botella”, señaló Malamud a Infocampo durante la presentación de esta nueva planta productiva.
Al punto de que la demanda superaba las capacidades productivas, y la mayoría de las empresas del sector debía entregar los equipos con retraso.
Fue en ese entonces que la firma con base en Las Rosas (Santa Fe), y que desde hace seis años forma parte del gigante multinacional, se decidió a encarar un ambicioso proyecto de ampliación, con una inversión de U$S 15 millones.
Hoy, con un escenario radicalmente distinto, producto de un desplome de ventas que comenzó con la sequía del año pasado y que por ahora no tiene luz al final del túnel, fue cuando finalmente PLA by John Deere pudo inaugurar esa obra.
No obstante, son optimistas: “La agricultura está hecha de ciclos; ahora estamos en un ciclo de baja, cuando venga el de alta estaremos preparados. No va a estar ese cuello de botella”, señaló Malamud a Infocampo durante la presentación de esta nueva planta productiva.
En concreto, la planta inaugurada por PLA by John Deere amplió la capacidad productiva de la empresa en un 50%.
En términos reales, significa hoy una capacidad instalada que le permitiría fabricar, si la demanda lo requiriera, 420 pulverizadoras y 350 sembradoras por año.
Cabe recordar que PLA es una firma histórica en el rubro de pulverizadoras y de hecho es la que lidera las ventas en Argentina, según estadísticas oficiales.
En cambio, en sembradoras es un jugador de menor share, pero que se puso como objetivo pelear palmo a palmo con las grandes empresas del sector.
La inversión, según precisó Malamud, se destinó a tres cuestiones:
-Ampliación de la nave industrial: se agregaron 5.500 metros cuadrados cubiertos, para hacer un total de 12.000 m2.
-Reorganización productiva: rotaron las líneas para ocupar mejor los espacios e incorporar más estaciones de trabajo, y con más tecnología en las línas de montaje.
-Sistema de pintura: es la gran vedette de la inversión. Una línea completamente automatizada de pintura, que agiliza los tiempos.
-Al hablar sobre cómo ve el mercado actual de maquinaria, Malamud sostuvo que “la expectativa con esta cosecha en curso es que no va a ser todo lo que esperábamos algunos meses atrás”, aunque ya “se va a recomponer un poco el flujo de los productores”.
“Con ayuda de algún financiamiento, podremos tener un segundo semestre mejor”, evaluó.
Sin embargo, reconoció que difícilmente el 2024 marque un repunte, porque además de los problemas propios que enfrenta la Argentina, el precio de los commodities está en un piso, “y esa es una realidad que desde Las Rosas no podemos cambiar”.
sembradoras y pulverizadoras PLA
De todos modos, vale insistir en que el optimismo domina a esta empresa: la ampliación de la nave dejó un amplio espacio para que se puedan seguir incorporando líneas de montaje, y Malamud anticipó que “hay planes en estudio para traer nuevos productos”. ¿Será alguno bajo la marca John Deere?
InfoCampo