En la jornada de este lunes, el gobernador Marcelo Orrego entregó las llaves de sus flamantes viviendas a 73 familias de Jáchal. Se trata del primer barrio del IPV de esta gestión.
El barrio, llamado Virgen de Fátima se encuentra en avenida Presidente Perón y calle Florida. Cuatro de las viviendas están adaptadas para personas con discapacidad.
En el acto de entrega de las viviendas, Orrego dijo: “Es un día emocionante, un día donde tenemos la oportunidad de llevarles tranquilidad a muchas familias, en este caso a setenta y tres familias, al lograr que tengan su propio hogar. Es una estructura que ustedes van a llenar con amor, compartiendo tiempo con sus familias”.
Agregó además que “gobernar implica resolver los problemas que la gente no puede solucionar por sí misma. Por eso, siempre debemos trabajar juntos. Este es uno de los días más importantes porque significa que muchas familias podrán hacer realidad su sueño de tener su propio hogar. Es un logro invaluable, tener un lugar propio. Este sistema es solidario; el gobierno hace un gran esfuerzo, pero también cada beneficiario, al pagar su cuota, contribuye a hacer realidad el sueño de otras familias”.
Para concluir agregó: “La obra pública es crucial, no solo por la construcción de viviendas, sino también por otros aspectos como la atención médica, la educación y la infraestructura vial. Conozco bien este querido departamento y sé que tiene todo lo necesario para crecer, especialmente un gran capital humano. Por eso, trabajaremos juntos para mejorar aún más”.
Por su lado, Elina Peralta dijo que “este es un momento de mucha alegría. Después de cuatro años hoy se puede cumplir el sueño, gracias al gobernador que reactivó las obras de este barrio y de otros barrios más en toda la provincia. Vamos a poder llevar el sueño a todas las familias de San Juan. Pedirles que cuiden su vivienda porque es un logro que lo hacemos entre todos, es un acto muy solidario”.
Acompañaron al gobernador Orrego, el intendente de Jáchal, Matías Espejo; ministro de Infraestructura, Agua y Energía, Fernando Perea, de Producción, Gustavo Fernández; directora del IPV, Elina Peralta; diputada Nacional, Nancy Picón; diputados provinciales, departamentales, concejales, y demás funcionarios provinciales.
Las viviendas están diseñadas de manera práctica y funcional, constando de dos dormitorios, un baño, una cocina-comedor y un lavadero exterior con mesada. Lo interesante de este proyecto es que permite transformar estas viviendas en viviendas evolutivas a bajo costo, brindando la posibilidad de expansión y crecimiento según las necesidades de los residentes.
En cuanto a los niveles de terminación, las viviendas cuentan con una estructura sismo resistente, mampostería de ladrillón macizo y una losa de hormigón armado con cielorraso de yeso. Los revoques, tanto interiores como exteriores, están finamente terminados y pintados, mientras que la cubierta del techo cuenta con aislación térmica y una membrana asfáltica de 4 mm de espesor para una mejor protección.
La instalación sanitaria incluye una cámara de inspección, y el baño está equipado con inodoro, bidet, lavatorio, accesorios y una claraboya para ventilación adecuada. La cocina cuenta con una mesada de granito natural de 2 cm de espesor, una bacha y una pileta de lavadero de acero inoxidable. Además, se provee un artefacto de cocina eléctrica de cuatro hornallas y horno, así como un termotanque solar.
Los revestimientos cerámicos se encuentran en el baño, el lavadero y la cocina. Las ventanas tienen carpintería de aluminio, mientras que las puertas cuentan con marcos metálicos pintados con antióxido y esmalte sintético. La carpintería de madera también está pintada con esmalte sintético, y todas las ventanas cuentan con mosquiteros.
La instalación eléctrica está completa, y se incluye un tanque de reserva tricapa de 850 litros. En el exterior, hay un veredín perimetral, una vereda de acceso individual y una vereda municipal. Además, se han instalado pérgolas metálicas en el acceso y en la fachada posterior, así como postes de marcado de lotes de hormigón.
En el caso de las viviendas para personas con discapacidad, el baño cuenta con artefactos, instalaciones y dimensiones especiales adaptadas, y el veredín perimetral tiene un ancho de 1,00 metro para facilitar la accesibilidad.