Cada etapa del cultivo demanda una cantidad específica de energía, proteína o fibra. Por eso resulta fundamental comprender las características de cada variedad y brindar lo mejor en el mejoramiento de especies vegetales.
RAGT en A Todo Trigo
La nueva genética de RAGT para la campaña fina está encabezada por dos destacadas variedades: RGT Quiriko y RGT Borsalino, reconocidas por sus excelentes cualidades agronómicas.
“Quiriko es una variedad de ciclo intermedio con un perfil sanitario óptimo y gran adaptabilidad. Y Borsalino, lanzada este año, está recomendada para ambientes de alto potencial de rendimiento, fechas tempranas y ofrece un rendimiento excepcional y un buen perfil sanitario”, cuenta a Agrofy News Eugenia Ferramondo, responsable del área de desarrollo de RAGT Argentina, en el marco de A Todo Trigo en la ciudad de Mar del Plata.
Respecto a la estrategia de la empresa en buscar nuevos mercados, Marcos Kaspar, líder de investigación de cereales de invierno de RAGT, comenta las inversiones en mejoramiento genético.
“RAGT invirtió en dos programas de mejoramiento genético, uno en Argentina (sudeste de Buenos Aires) y otro en Brasil (Paraná), con el objetivo de generar materiales adaptados a cada mercado y maximizar los rendimientos de los productores. En Argentina, el enfoque está en completar un portafolio diversificado que abarque variedades de ciclo corto, intermedio y largo, con distintas características de calidad”.
La empresa cuenta con una amplia red de pruebas en Argentina y Europa, así como laboratorios de calidad que permiten garantizar un perfil sanitario completo, altos rendimientos y una calidad comercial óptima en sus materiales. "Estamos buscando darle respuestas al productor sobre los tres principales desafíos que tiene cuando busca maximizar su producción", explica Kaspar a Agrofy News.
Sanidad: liberar al mercado materiales que tengan un perfil sanitario completo, con tolerancia a las principales enfermedades que en este caso generalmente son royas, amarilla de la hoja y del tallo.
Rendimiento: con una genética que viene de Francia, los materiales tienen el potencial del rendimiento deseado.
Calidad: contar con un laboratorio propio permite hacer análisis en etapas tempranas del desarrollo y seleccionar rápidamente aquellos materiales que tengan la calidad apta para el mercado argentino.
Además de Argentina y Brasil, RAGT está explorando nuevos mercados y trabajando en el desarrollo de trigo híbrido en Australia, con la visión de ofrecer un portafolio completo para satisfacer las necesidades de los productores en el corto plazo.
"Queremos transmitir todo el potencial genético que tenemos", concluyó Agustín Cantó, líder de negocio de cultivos de invierno de RAGT Semillas.
Agrofy