Cómo hacer un jardín eterno

Si no has encontrado uno que de verdad te guste o si prefieres hacerlo tú para que te salga más barato, te contamos los pasos y todo lo que necesitas para crear el tuyo propio. ¿Vamos a ello?

Qué necesitas para hacer un jardín eterno

Como te hemos dicho antes, un jardín eterno es algo bellísimo para tener, no sólo como decoración, sino también como una forma de tener un pedacito de la naturaleza en tu hogar.

Pero para ello, has de tener todo los elementos para construirlo. Y estos son los siguientes:

-Piedras. Son muy importantes porque constituirán la base de tu diseño. Pueden ser guijarros, piedra volcánica… El objetivo de estas va a ser mantener el agua alejada de la tierra de tal manera que no se encharque y mate a las plantas. Por eso es que no debes echar solo unas poquitas, sino cubrir la base completa.

-Arena. Algunos, entre las piedras y la tierra de las plantas, deciden colocar una capa de arena para filtrar mejor. No es mala idea hacerlo porque mantendrá un mejor orden en ese ecosistema.

-Tierra. Puede ser tierra universal. Pero lo mejor es que elijas un tipo de sustrato que vaya acorde con las plantas que vayas a introducir. De esa manera, sabrás que tienen todos los nutrientes adecuados para desarrollarse de manera correcta. Eso quiere decir que a veces tendrás que mezclarla con un drenaje (como perlita) o bien con un abono extra.

-Plantas. Las plantas no deben ser demasiado grandes, sobre todo si vas a poner varias de ellas. Ten en cuenta que estas van a crecer en un espacio limitado por lo que si escoges plantas que sean de crecimiento lento o bien de las que no tengan un tamaño demasiado grande en su adultez.

-Por último, todo esto debe estar en un tarro, una botella, un bol, un cuenco o similar. Los mejores son los de cristal por los beneficios que ofrece este a las plantas. Así que te recomendamos que compres uno adecuado. Si eres principiante intenta escoger uno que tenga una apertura bastante ancha para poder meter las manos sin problema y construir tu jardín eterno sin grandes dificultades.

Opcionalmente hay muchos jardines eternos con una capa de musgo (es lo que hace que tengan ese verdor en el suelo). De hecho, algunos incluso cubren todo el recipiente (la base) con ese musgo creando así una especie de «bola» que protege el musgo. No es una mala idea para esto es personal. Puedes ponerlo o no. Decorativamente se verá más bonito, sí, pero también dependerá del tipo de plantas y de jardín eterno que quieras crear (si es de suculentas y más de secano), tropical…

Cómo hacer un jardín eterno paso a paso

Ahora que tienes todos los elementos necesarios para hacer tu jardín eterno es hora de ponerte manos a la obra.

Lo primero será lavar bien y secar el recipiente donde vas a tener el jardín eterno. Esto puede parecer una tontería, pero es la forma de que no tengas problemas de algún hongo o virus que vaya a afectar a las plantas y mueran.

Una vez lo tenga listo, debes introducir las piedras. Te aconsejo que las metas despacio y no las dejes que caigan desde una gran distancia o altura para que no se rompa el recipiente. Intenta distribuirlas de manera uniforme por la zona.

Cuando estés satisfecho con el resultado haz lo mismo con la arena o con la tierra (dependiendo de si vas a ponerle arena o no). El objetivo es darle la forma que tú quieras (que no tiene por qué ser recta). Eso sí, debes tener en cuenta el desarrollo de las raíces de las plantas ya que, si lo pones inclinado, deberás plantar aquellas con pocas raíces en la zona donde hay menos tierra.

El último paso que debes llevar a cabo es el de colocar las plantas. Tendrás que ayudarte de una pala o similar, así como de tus manos, para que quede todo bien instalado y sobre todo que no se caiga o se mueva con el movimiento.

Justo después debes regar un poco. Lo mejor es hacerlo pulverizando porque si echas el agua puedes crear agujeros que afearán el aspecto de tu jardín eterno.

De manera opcional, como te hemos dicho en el epígrafe anterior, podrías colocar musgo para que le diera un aspecto más natural a ese ecosistema que has creado. Muchos prefieren ponerlo antes de plantar, pero después tienen dificultad para hacer esos «agujeros» por donde introducir las plantas, además de que estas a veces no quedan bien asentadas en la tierra. Por eso preferimos decirte que lo hagas después, intentando cubrir toda la parte de la tierra para que no se vea nada. El musgo también ayudará a mantener una temperatura constante y húmeda en el recipiente, por lo que debes controlar que esta no sea demasiado como para pudrir las plantas.

Cuidados importantes de un jardín eterno

Como ves, hacer un jardín eterno no es complicado. De hecho, puede salirte más barato que los que se compran en las tiendas. Pero no basta con armarlo y ya está. Si de verdad quieres que se mantenga en el tiempo como el primer día debes prestar atención a:

-La temperatura en el interior. Porque si es muy calurosa puede afectar a las plantas en sí.

-La humedad. Es verdad que los jardines eternos tienen una alta humedad, sobre todo los que están cerrados, pero cuando esta es demasiado acabará por matar a las plantas. Si el recipiente es cerrado quizá debas dejarlo abierto; y si está abierto y la humedad es pobre, podrías necesitar un humidificador o tener que pulverizar a menudo.

-El riego. Si hay una alta humedad, el hecho de regarlo es casi innecesario. Pero cuando hay que hacerlo hay que encontrar el equilibro adecuado para las plantas. Esto, a veces, implica escoger siempre plantas con similares características y cuidados para evitar que unas se dañen más que otras por estos cuidados.

-La luz. Necesitarás que lo coloques en un lugar iluminado. Según las plantas, puede que necesiten algunas horas de luz directa o no. Pero cuidado, porque esa luz estará filtrada por el cristal y puede ser más dañina que beneficiosa.

¿Te animas ahora a hacer tu jardín eterno?

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