Por Agroempresario.com
En una nota reciente publicada por La Nación, se revela el fascinante mundo de la pizza, una de las comidas más populares y queridas a nivel mundial. Desde la tradición culinaria de Italia hasta la adaptación local en Buenos Aires, la pizza ha logrado conquistar paladares en todo el planeta, convirtiéndose en un fenómeno global que va mucho más allá de un simple plato.
La pizza es tan popular que representa el 20% de todos los restaurantes del mundo. En promedio, cada persona consume alrededor de 46 porciones al año, y países como México y Estados Unidos lideran el consumo con cifras asombrosas: 120 millones y 650 millones de pizzas anuales, respectivamente. Esta tendencia global destaca la universalidad y la adaptación de la pizza en diversas culturas y regiones.
El libro de referencia mundial “Where to Eat Pizza” clasifica las ciudades con mayor consumo de este plato emblemático. En la cima de la lista se encuentra San Pablo, seguido por Nueva York, Nápoles, y en una competencia cerrada, Buenos Aires y Ciudad de México luchan por el cuarto lugar. Esta competencia entre ciudades refleja la gran diversidad en la forma en que la pizza es disfrutada y adaptada en diferentes lugares.
Argentina no es ajena a la popularidad de la pizza. En el país, existen alrededor de 6000 pizzerías, con la mitad ubicadas en la provincia de Buenos Aires. La pizza de muzzarella se destaca como la favorita, tanto en tamaños grandes como pequeños, seguida por otras variedades como la napolitana y la de jamón y morrón. Esta preferencia local resalta la rica tradición pizza en el país y la importancia de la pizza en la cultura argentina.
En el ámbito internacional, Argentina ha demostrado su destreza en la pizza al obtener el segundo lugar en la categoría "Pizza Napolitana STG" en el Campeonato Mundial de la Pizza en Parma, Italia. El maestro pizzero argentino Ezequiel Ortigoza también brilló en otras categorías, como velocidad y acrobacia, mostrando la habilidad y la creatividad de los pizzeros argentinos en una competencia global.
La pizza ha evolucionado significativamente, con la aparición de nuevos estilos y sabores. Desde el estilo napolitano hasta el NY Style y la pizza sin gluten, la innovación ha llevado a la creación de variedades únicas y a veces inusuales, como pizza con sushi, carne de canguro, y hasta algodón de azúcar. Esta evolución muestra la adaptabilidad del plato y cómo ha sido reinterpretado en diferentes contextos culturales.
Roberto y Mateo Petersen, expertos en pizza, destacan la riqueza de la experiencia pizzera, desde la pizza Napoletana en Nápoles hasta la pizza al molde en Buenos Aires. Su enfoque en la evolución y el disfrute de la pizza subraya cómo la tradición y la innovación se entrelazan en la creación de nuevas experiencias gastronómicas.
La pizza sigue siendo un símbolo de la diversidad culinaria global y una muestra de cómo un plato simple puede conectar culturas y gustos en todo el mundo. La información presentada en esta nota, basada en un artículo de La Nación, resalta la importancia de la pizza en la vida cotidiana y en el escenario gastronómico internacional.