Por Agroempresario.com
En el reciente Congreso de Aapresid, líderes del sector agrícola compartieron sus perspectivas sobre cómo optimizar la producción en las Américas con recursos limitados. El panel, que incluyó a Rattan Lal de la Universidad Estatal de Ohio, María Beatriz “Pilu” Giraudo del INTA, Juan Farinati de Bayer Cono Sur y Marcelo Torres de Aapresid, centró su discusión en el desafío de “producir más con menos”.
Rattan Lal, director del Centro de Manejo y Secuestro de Carbono (C-MASC) y co-líder del programa Suelos Vivos en las Américas, destacó la vital importancia del suelo para la vida planetaria y la necesidad de adoptarlo como estrategia clave. “La agricultura regenerativa es fundamental para lograr una producción en armonía con los recursos naturales”, afirmó Lal durante su intervención.
En consonancia, María Beatriz Giraudo subrayó la importancia de la ciencia y el rigor detrás de las tecnologías agrícolas. “La investigación y la aplicación de indicadores son esenciales para reducir la huella ambiental y fomentar el uso de energías renovables”, comentó Giraudo. Destacó la importancia de que tanto productores como científicos se alineen con las prácticas que promuevan la biodiversidad.
Marcelo Torres, presidente de Aapresid, abordó la necesidad de planificación tanto a nivel local como global. “Para 2050, la agricultura deberá producir más del 50% de los alimentos”, dijo Torres. Insistió en la importancia de una colaboración pública-privada eficaz y el uso de tecnología para fomentar la innovación en el sector.
Juan Farinati, presidente de Bayer Cono Sur, enfatizó la relevancia del conocimiento colaborativo y colectivo. “Es fundamental entender el sistema productivo a largo plazo y utilizar todas las herramientas disponibles para aumentar la eficiencia”, indicó Farinati. Destacó que la agricultura regenerativa puede mejorar la productividad, como lo demuestra un estudio de siete años que muestra un incremento del 9% en el rendimiento, acompañado de una reducción en el consumo de agua y emisiones.
El panel concluyó con un consenso sobre la necesidad de integrar ciencia, tecnología y colaboración para enfrentar los retos futuros de la agricultura y avanzar hacia un modelo más sostenible y eficiente.