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Por Agroempresario.com
En la campaña 2024, el girasol se perfila como una excelente opción para los productores, impulsado por factores globales y climáticos favorables. La guerra en Rusia y Ucrania, combinada con un fenómeno Niña que promete un año más seco, contribuyen a un entorno propicio para este cultivo.
En el ámbito internacional, las expectativas para el precio del aceite de girasol son alentadoras, debido a las dificultades en la región productora principal. En el campo, el fenómeno Niña, aunque atenuado, ofrece una ventaja al girasol por su capacidad de adaptación y resistencia. La rusticidad del girasol, con raíces profundas que buscan agua en capas más bajas del suelo, garantiza una cosecha en condiciones secas, facilitando también el manejo de enfermedades, una preocupación común entre los productores.
Francisco Cinque, gerente general de Advanta, destaca que los últimos años de sequía han incrementado el interés de los productores por el girasol. En este contexto, las herramientas genéticas de Advanta, desarrolladas a lo largo de 25 años, se presentan como una solución efectiva. La "Súper Era Advanta" ha demostrado un rendimiento destacado con tres híbridos adaptados a diversas regiones: ADV 5407 CL, ADV 5505 CL y ADV 5310 CL, todos con un contenido de aceite superior al 53%.
Advanta ha lanzado recientemente el híbrido ADV 5420 CL Plus, diseñado para ambientes de alto potencial en el Norte del país. Este híbrido no solo ofrece un mayor contenido de aceite, sino también una adaptabilidad sobresaliente a las condiciones del NEA. En esta región, el ADV 5420 CL Plus se presenta como una herramienta ideal para lograr altos rendimientos y un contenido de aceite elevado, complementado por los híbridos ADV 5505 CL y ADV 5407 CL, que siguen siendo opciones valiosas para diferentes niveles de potencial productivo.
Para el sudeste y sudoeste de Buenos Aires, Advanta propone el híbrido ADV 5310 CL, que se destaca por su ciclo intermedio-corto, ideal para cultivos de doble propósito. Este híbrido ofrece un alto rendimiento y una producción de aceite sobresaliente, además de una mayor tolerancia a la phomopsis, una de las principales amenazas para el girasol.
En resumen, el girasol se posiciona como una alternativa prometedora para esta campaña, con condiciones favorables tanto a nivel global como climático, y con opciones genéticas avanzadas que optimizan su rendimiento en diversas regiones productivas.
