Por Agroempresario.com
Argentina se posiciona como el sexto mayor productor de biodiésel a nivel mundial, gracias a un complejo industrial compuesto por 32 plantas distribuidas en cinco provincias. Santa Fe, Buenos Aires y La Pampa lideran la producción, generando un impacto significativo tanto en el mercado interno como en el externo.
El sector ha mostrado un crecimiento constante desde 2008, aunque no exento de desafíos. La capacidad instalada y la producción varían considerablemente entre provincias, con Buenos Aires liderando en cantidad de plantas, mientras que Santa Fe se destaca en volumen de producción. En Córdoba, la iniciativa de autoconsumo ha permitido el desarrollo de plantas de baja escala, enfocadas en satisfacer las necesidades locales.
A nivel global, Argentina aporta un 3,3% del biodiésel producido, compitiendo en un mercado dominado por la Unión Europea, Estados Unidos, Indonesia y Brasil. Las diferencias en el uso de materias primas entre países reflejan las particularidades regionales y las estrategias de desarrollo sostenible.
El mercado interno de biodiésel ha evolucionado desde su inicio, con un crecimiento en la mezcla con gasoil, actualmente en 7,5%. La proyección es alcanzar un 10% para fin de año, y seguir aumentando gradualmente hasta llegar al 15% en 2027.
En cuanto a las exportaciones, han experimentado altibajos en los últimos años, influenciadas por factores como las fluctuaciones en los precios internacionales y la producción local. Aunque 2024 muestra una recuperación, se prevé que las exportaciones se mantendrán en niveles bajos.
El sector enfrenta también desafíos en el contexto macroeconómico y la competencia del biodiésel HVO, especialmente en mercados como Estados Unidos. La industria argentina necesita adaptarse a estas nuevas realidades para continuar siendo un actor relevante en el mercado global.
El biodiésel en Argentina tiene un papel importante tanto en la economía nacional como en la escena internacional, pero debe superar varios obstáculos para consolidar su posición y aprovechar al máximo sus capacidades productivas.