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La primera gran tanda de obras para ampliar el sistema de gasoductos se acerca a la recta final y permitirá un fuerte salto en el transporte de gas de Vaca Muerta que mejorará notablemente el abastecimiento de cara al 2025.
Luego de la inauguración del primer tramo del Gasoducto Néstor Kirchner, el pasado nueve de julio se puso en marcha la planta compresora de Tratayén, que recién hacia fines de agosto pudo alcanzar su máximo de capacidad de inyección.
De hecho, los datos del Enargas marcan que esta semana el GPNK llegó al récord de transporte de 20,7 millones de metros cúbicos en un día, una cifra que recién se esperaba para cuando tenga su segunda planta compresora en operación.
Técnicos de la industria indicaron a este medio que esta mayor inyección a la prevista se explica por la calidad de gases ricos de Vaca Muerta y el saldo remanente en tramos finales del caño, algo que se irá reduciendo cuando la planta de tratamiento de TGS entre en funcionamiento al sacar muchos líquidos.
No obstante, la inminente puesta en marcha de la planta compresora de Salliqueló seguirá incrementando los volúmenes transportados desde Vaca Muerta a través de este nuevo caño troncal.
Según fuentes de la Secretaría de Energía, la inauguración tendrá lugar durante la primera quincena de septiembre, cuando empezará a inyectar otros 5 millones de metros cúbicos diarios.
Ya a fin de mes, sería el turno de una primera etapa de la Reversión del Gasoducto Norte con la cual la capacidad del caño pasará de 10 a 15 MMm3/d. El primer hito para llegar a este punto fue la finalización de los primeros 100 kilómetros de gasoducto llevados a cabo por el consorcio Techint-Sacde. En segundo lugar, TGN informó que las obras de readecuación en sus plantas compresoras de Deán Funes y Ferreyra ya están concluidas.
La UTE Techint- Sacde completaron la soldadura de caños de la obra de reversión del Gasoducto Norte.
De este modo, solo faltan unos 22 km de gasoducto troncal que corresponden al renglón 1 y los primeros 31 km de loop (de los 62 km totales) para poder habilitar esta nueva capacidad en sentido sur-norte y llegar con gas neuquino hasta Tucumán y Salta.
El total de la obra de reversión para llegar a 19 MMm3/d (4 MMm3/d más que en esta etapa intermedia) se completaría en el primer trimestre del 2025 cuando finalice la construcción de esos 31 km de loops restantes y las plantas compresoras de Lavalle (Santiago del Estero) y Lumbreras (Salta).
El panorama inauguraciones se completa con la puesta en marcha de la planta compresora de Mercedes que estaría lista en octubre y permitirá sumar unos 4 MMm3/d al gasoducto Mercedes-Cardales que conecta el sistema sur de TGS con el sistema norte de TGN.
“Avanzan los trabajos en la planta compresora. Los equipos concretan la colocación de los caños de succión y descarga, provenientes de China”, celebraron desde Enarsa. “Con la terminación de la planta compresora en Mercedes, se podría utilizar en toda su capacidad el gasoducto Mercedes-Cardales para abastecer desde Vaca Muerta la zona de Litoral”, agregan desde el CEARE.
La planta compresora de Mercedes del GPNK estaría lista en octubre.
Si bien todavía hay muchas otras obras en carpeta como el segundo tramo del GPNK y el proyecto de TGS que, con cuatro nuevas plantas compresoras, sumaría otros 14 MMm3/d al sistema, esta primera etapa de refacciones ya constituye un salto enorme que tendrá efectos notables de cara al invierno del 2025.
“Respecto del año 2023, en 2024 se reemplazan 9 MMm3/d de GNL y 5 MMm3/d de Bolivia con 13 MMm3/d de gas adicionales de Vaca Muerta en el invierno. Fuera del invierno, se puede continuar con la inyección en Tratayén-Salliqueló para reemplazar 5 MMm3/d de gas de Bolivia y la demanda de Fueloil y Gasoil fuera del invierno. En total, esto representa un ahorro en combustible de las centrales térmicas de unos 1500 millones de dólares que debería verse reflejado en una disminución del costo de electricidad”, explica el ingeniero Raúl Bertero, presidente del CEARE.
La UTE Techint- SACDE finalizaron en tiempo récord los trabajos en la reversión del Gasoducto Norte.
En consecuencia, para 2025 desaparecería la importación de gas de Bolivia, la inyección a gasoductos en Vaca Muerta (sin contar los consumos locales de Neuquén) pasa de 83 MMm3/d en el invierno 2023 a 104 MMm3/d en el invierno 2025 y se reduce el consumo de combustibles líquidos por el equivalente a unos 3 MMm3/d de gas, representando una disminución de otros 800 millones de dólares en el costo de abastecimiento anual de gas para las centrales térmicas.
Proyectando un escenario a mediano plazo, desde el CEARE se muestran confiados en que se pueda llegar a una exportación de gas de unos 2.500 millones de dólares al año con una serie de obras puntuales.
Hacia Chile podría escalarse de los 11 MMm3/d en promedio actuales a 17 MMm3/d sin necesidad de nueva infraestructura. Dado que Paraguay ha manifestado interés en instalar una central térmica de 600 MW, se podría usar la capacidad de transporte del GNEA llevando unos 2.5 MMm3/d de gas de Vaca Muerta a la frontera con Paraguay, dicen en este centro de estudios energéticos.
Finalmente, el trabajo de Bertero considera que la opción más factible para exportar a Brasil es la construcción del gasoducto entre Uruguayana- Porto Alegre. “El actual gasoducto a Uruguayana ya tiene realizado el cruce subfluvial del Río Uruguay. Con compresión, es posible alcanzar un volumen de entre 12 y 15 MMm3/d. Para esos niveles de exportación sería necesario completar el segundo tramo del gasoducto NK”, sostienen.
LMNeuquen
