Por Agroempresario.com
La pérdida de biodiversidad en todo el mundo se ha convertido en una preocupación urgente, ya que se estima que la Tierra se enfrenta a una sexta extinción masiva de especies. Factores como el cambio en el uso del suelo, la sobreexplotación de recursos naturales, las invasiones biológicas y el cambio climático están influyendo en la drástica reducción de las poblaciones de diversas especies. En este contexto, un grupo de científicos de Australia, Canadá, Estados Unidos y Hungría ha propuesto una solución innovadora: proteger los "refugios climáticos".
Estos refugios son espacios naturales donde los efectos del cambio climático se sienten de manera menos intensa. Según el investigador Gunnar Keppel, "los refugios pueden ser laderas de montañas que miran a los polos, donde las temperaturas se mantienen más frescas". Además, pueden incluir áreas con manantiales persistentes que experimentan menos estrés por sequía.
El cambio global está provocando fenómenos drásticos, como el blanqueamiento de corales y la muerte masiva de árboles. Los investigadores han subrayado que "la velocidad y la magnitud del cambio global están desafiando los enfoques tradicionales de conservación de la biodiversidad". Por ello, es fundamental identificar y proteger los lugares menos afectados por el estrés climático, donde las especies tienen mayores probabilidades de sobrevivir.
Para conservar estos refugios, los científicos proponen tres medidas clave: identificar las especies que dependen de estos espacios, protegerlos adecuadamente y gestionar su conservación para garantizar su eficacia en el futuro. Keppel enfatiza que "sin apoyo, las especies de esos lugares menos impactados también pueden tener dificultades para sobrevivir a medida que avanza el cambio climático".
La científica Sandra Díaz, miembro del comité asesor de la ONU, complementa esta visión al advertir que "conservar refugios climáticos es útil, pero insuficiente para contrarrestar la pérdida global de biodiversidad". Con casi un millón de especies amenazadas de extinción, la situación es crítica.
Investigaciones recientes en Sudamérica han identificado varios refugios climáticos, muchos de los cuales no están dentro de áreas protegidas. Proteger estos espacios podría requerir inversiones relativamente modestas, pero su importancia para la conservación de la biodiversidad es incuestionable.
Con la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad (COP16) programada para octubre en Cali, Colombia, es crucial que los líderes mundiales reconozcan la necesidad de implementar estrategias efectivas para proteger estos refugios y abordar la crisis de biodiversidad de manera integral.