Día Nacional de la Patagonia

Por aquel entonces el Presidente Nicolás Avellaneda sancionaba la Ley 954 creando dicha jurisdicción y estableciendo la sede de las autoridades en la localidad de Mercedes de Patagones, hoy ciudad de Viedma, capital de Río Negro. Su primer gobernador fue el coronel Álvaro Barros.

Tras la Campaña del Desierto (1879-1885), el General Julio Argentino Roca propició políticas para fomentar el desarrollo de la población en ese territorio, el más austral y extenso de todas las regiones que conforman el país.

El 16 de octubre 1884, el Gobierno decretó la ley de Territorios Nacionales (N° 1532), que determinó legislativamente que el territorio patagónico quedaría dividido en las gobernaciones de Río Negro, Neuquén, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego. De este modo se disolvió la Gobernación de la Patagonia.

Desde la cordillera de los Andes hasta la vasta estepa patagónica, esta región ofrece un sinfín de maravillas para los amantes de la naturaleza y los aventureros. Entre sus principales atracciones se encuentran los glaciares, lagos cristalinos, bosques milenarios, y una fauna diversa que incluye especies icónicas como el guanaco, el puma, y el majestuoso cóndor andino.

Uno de los destinos más emblemáticos es el Parque Nacional Los Glaciares, en la provincia de Santa Cruz, donde se encuentra el famoso Glaciar Perito Moreno, una de las pocas masas de hielo en el mundo que sigue avanzando.

Otro lugar de ensueño es el Parque Nacional Nahuel Huapi, en Río Negro y Neuquén, conocido por sus lagos azules, montañas nevadas y la pintoresca ciudad de San Carlos de Bariloche.

Más al sur, la Península Valdés, en la provincia de Chubut, es un refugio para la vida marina. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es el hogar de ballenas francas australes, pingüinos, orcas y lobos marinos, y es un lugar privilegiado para el avistamiento de fauna marina.

El Día Nacional de la Patagonia nos invita a reflexionar sobre la importancia de preservar este vasto y extraordinario ecosistema, que no solo es una joya turística, sino también un patrimonio natural que debemos proteger para las generaciones futuras.