Por Agroempresario.com
Ubicado en la provincia de Jujuy, Maimará es un tesoro escondido en la Quebrada de Humahuaca, que ofrece una experiencia única tanto para los amantes de la naturaleza como para los buscadores de paz. A tan solo 2.383 metros sobre el nivel del mar, este pintoresco pueblo se despliega ante la vista de sus visitantes con el majestuoso fondo de la montaña Paleta del Pintor, famosa por sus tonalidades vibrantes y su espectacular relieve.
Maimará es un destino que invita a disfrutar de la serenidad, ideal para aquellos que desean alejarse del ajetreo urbano. Aunque es posible recorrer la localidad en un solo día, los guías locales sugieren extender la estadía para realmente apreciar sus imponentes vistas y explorar sus senderos naturales. “Este lugar es perfecto para quienes buscan un refugio de tranquilidad en un entorno natural incomparable”, afirman los expertos del área.
Los visitantes pueden aventurarse en actividades al aire libre, como trekking en el Cerro Paleta del Pintor, donde se les brinda la oportunidad de alcanzar cimas que ofrecen panorámicas sorprendentes de la región. Además, Maimará cuenta con múltiples senderos que permiten explorar ríos y miradores, haciendo del turismo activo una parte esencial de la experiencia.
Entre sus atractivos culturales, destacan la Iglesia Nuestra Señora de la Candelaria, situada en una posición privilegiada en lo alto de los cerros, y el Cementerio de Altura, que refleja las costumbres locales a través de sus coloridas ofrendas. “Cada rincón de Maimará cuenta una historia que vale la pena descubrir”, señalan los guías.
El acceso a este idílico lugar es sencillo, ya que se encuentra a menos de 80 kilómetros de San Salvador de Jujuy, con un recorrido que dura aproximadamente una hora y cuarto por la Ruta Nacional 9.
En resumen, Maimará no solo ofrece un respiro de paz y belleza, sino que también brinda una rica experiencia cultural y oportunidades para la aventura. Es, sin duda, un destino que merece ser explorado en el corazón del noroeste argentino.