Argentina logró consolidarse como el tercer exportador neto de alimentos a nivel mundial en 2022, ubicándose solo detrás de Brasil y Estados Unidos, de acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Este posicionamiento se debe al volumen de toneladas exportadas, que permitieron al país sostener una posición privilegiada dentro del comercio global de alimentos.
El informe, elaborado por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) con información de la FAO, detalló que Argentina mantiene un rol destacado entre los principales exportadores de productos agrícolas y alimentarios.
La FAO recopila, procesa y publica esta información anualmente bajo la metodología de las Estadísticas de Comercio Internacional de Mercancías (IMTS), la cual abarca todas las exportaciones e importaciones de productos alimentarios en el mundo.
El análisis realizado por Natalia Marín, Tomás Rodríguez Zurro y Patricia Bergero para la BCR señaló que, “pese a este logro, el crecimiento de Argentina en los últimos 20 años no fue tan acelerado como el de otros países líderes”, destacó el informe.
Aun así, el país mantiene una contribución significativa al abastecimiento global, fortaleciendo su rol dentro de un sector cada vez más competitivo y en expansión.
El país se mantiene como un jugador clave en el mercado global de alimentos, aunque su ritmo de expansión fue más moderado en comparación con otras economías emergentes.
Si bien el país ocupa el tercer lugar en términos de exportación neta de alimentos, su crecimiento en las últimas dos décadas se apoyó principalmente en productos tradicionales de su canasta exportadora: maíz, harina de soja y trigo.
Estos bienes siguen siendo fundamentales para el ingreso de divisas en el sector agroexportador argentino, aunque el desafío de diversificar y agregar valor persiste para poder mantener su competitividad.
Brasil, que ostenta el liderazgo en exportaciones netas de alimentos, triplicó su volumen exportador en los últimos 20 años y ha desplazado a Estados Unidos, con un avance impulsado por la expansión de su industria agrícola y su capacidad de abrir nuevos mercados.
Por otro lado, India mostró un crecimiento notable, cuadruplicando sus exportaciones, en gran medida por su dominio en la exportación de arroz, un producto esencial en las dietas de muchas naciones.
Estas tendencias reflejan un cambio en el mapa global de abastecimiento de alimentos, donde los países en desarrollo ganaron terreno como grandes proveedores.
En términos de valor, Argentina logró ubicarse en 2022 en el segundo puesto del ranking de exportadores netos de alimentos, con un total de US$45.787 millones en exportaciones. Este volumen la coloca solo detrás de Brasil, que alcanzó los US$123.130 millones.
A pesar de los importantes volúmenes exportados, la evolución de las exportaciones netas de alimentos de Argentina en términos de valor mostró un crecimiento relativamente moderado en comparación con otros países.
A comienzos del nuevo milenio, las exportaciones netas de alimentos argentinas totalizaban alrededor de US$10.600 millones, lo que significa que en 20 años se multiplicaron por poco más de cuatro.
En contraste, Brasil, que exportaba cerca de US$13.000 millones de dólares en 2000, multiplicó por casi 10 el valor de sus exportaciones netas de alimentos en el mismo período.
India, por su parte, experimentó un crecimiento aún más impresionante, pasando de US$2.700 millones en 2002 a US$19.300 millones en 2022, septuplicando el valor de sus exportaciones en dos décadas.
TNCAmpo