Por Agroempresario.com
Argentina se consolida como una potencia mundial en el consumo de huevos, con un promedio de 360 unidades per cápita al año, ocupando el segundo lugar global detrás de México. Este alimento, versátil y accesible, ha trascendido su rol de ingrediente para convertirse en protagonista de la dieta diaria de los argentinos.
"El huevo no es elegido como un ingrediente, sino como un alimento principal", afirmó Javier Prida, presidente de la Cámara Argentina de Productores Avícolas (CAPIA), en una cita tomada del artículo original. Su practicidad y riqueza nutricional lo convierten en un recurso indispensable en los hogares del país, desde tortillas caseras hasta sofisticadas variantes gourmet.
El sector avícola enfrentó en 2023 un reto significativo con la Influenza Aviar, una amenaza que comprometió la producción. Sin embargo, gracias a medidas sanitarias conjuntas entre el sector público y privado, se logró superar la crisis y garantizar el abastecimiento. En 2024, el panorama cambió notablemente. "Fue un año excelente", destacó Prida, subrayando un consumo interno robusto y una reducción en los costos de insumos clave como maíz y soja, que representan el 55% del costo de producción.
La producción de huevos es un motor económico para Argentina, con presencia en 18 provincias y más de 32.000 empleos directos e indirectos. Provincias como Buenos Aires, Entre Ríos, Córdoba y Mendoza lideran esta industria, que no solo abastece al mercado interno sino que también impulsa las exportaciones.
Más allá de su precio competitivo, el huevo es una joya nutricional. Cada unidad aporta 6,5 gramos de proteínas de alta calidad, antioxidantes como luteína y zeaxantina, y vitaminas esenciales como la B12. Según datos del sector, el 84% de los consumidores elige el huevo por sus beneficios nutricionales, que incluyen la protección ocular, el fortalecimiento inmunológico y la reparación muscular.
Con un mercado interno consolidado y exportaciones en expansión, el huevo mantiene un lugar privilegiado en la dieta y economía de los argentinos. Como afirmó Prida, "este crecimiento nos demanda asumir un compromiso aún mayor para satisfacer las expectativas de nuestros consumidores".
Mientras disfrutamos de un omelette o unos huevos rellenos, no cabe duda de que este alimento es más que un plato en la mesa: es parte esencial de la identidad argentina.