Por Agroempresario.com
La inflación en Argentina ha mostrado signos de desaceleración en los últimos meses de 2024. A pesar de las altas expectativas del año pasado, que marcó un índice récord de 211% anual, la medición de este año muestra un panorama diferente. Según las principales consultoras privadas, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de diciembre cerraría con una variación cercana al 2,4%, lo que llevaría la inflación anual a un 120%, una mejora significativa respecto a 2023.
Aunque el dato final de diciembre será publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) en enero de 2025, diversas consultoras ya anticipan que el cierre de 2024 estará en torno a los 120 puntos porcentuales, con una baja considerable en comparación al 211% registrado en 2023.
Uno de los sectores más afectados por la inflación el año pasado fueron los alimentos, que aumentaron un 251,3%. Otros rubros que experimentaron fuertes aumentos fueron el equipamiento y mantenimiento del hogar, con un incremento del 231,7%, y la salud, que subió un 227,7%.
El analista económico Damián Di Pace proyectó que el IPC de diciembre alcanzaría el 2,8%, mientras que Fausto Spotorno calculó que la cifra mensual podría ubicarse entre el 2,5% y el 3%. En cuanto a los factores que han ayudado a controlar la inflación, se destacan la depreciación controlada de la moneda y una base de comparación más estricta.
Para el futuro cercano, las consultoras pronostican una tendencia de desaceleración sostenida, con una inflación proyectada para 2025 que no debería superar los niveles actuales. Sin embargo, los economistas advierten que los primeros meses del año, especialmente diciembre y enero, pueden presentar una inflación estacionalmente más alta.