Por Agroempresario.com
El Régimen de Incentivos para la Generación de Inversiones (RIGI), impulsado por el presidente Javier Milei, ha comenzado a mostrar resultados significativos en su primer periodo de implementación. Hasta la fecha, se han recibido solicitudes de inversión que superan los USD 12.000 millones, destacándose principalmente en los sectores de energía y minería. Las provincias más beneficiadas incluyen Río Negro, Mendoza, Catamarca, Salta, San Juan, Buenos Aires y Jujuy.
Hasta ahora, el único proyecto aprobado por el Gobierno es el de YPF Luz, que contempla la construcción del parque eólico “El Quemado y Anexos” en Mendoza, con una inversión de USD 200 millones. Sin embargo, se espera que en los próximos días se sumen más iniciativas al RIGI, ya que las proyecciones oficiales indican que podrían ingresarse proyectos por un total de USD 54.000 millones, de los cuales USD 30.000 millones estarían vinculados al sector energético.
Una vez que los proyectos son ingresados al sistema formal del RIGI, comienza un proceso administrativo que culmina en su aprobación. Las tres secretarías coordinadoras del Ministerio de Economía —Energía y Minería, Producción, e Infraestructura— evalúan cada propuesta antes de que pase a un comité evaluador.
Se prevé que al menos tres proyectos adicionales podrían ingresar al RIGI en las próximas semanas, lo que podría sumar más de USD 5.000 millones a las inversiones ya solicitadas. Entre ellos se destaca:
Tecpetrol: La empresa del Grupo Techint está considerando ingresar con USD 1.300 millones para desarrollar el área de Los Toldos II Este, que tiene como objetivo alcanzar una producción de 35.000 barriles diarios en octubre de 2026, y llegar a 70.000 para mediados de 2027.
Rio Tinto: La minera global ha anunciado una inversión de USD 2.500 millones para expandir su proyecto Rincón en Salta, aumentando la capacidad de producción a 60.000 toneladas anuales de litio de grado batería.
Central Puerto y YPF Luz: Ambas empresas han acordado avanzar en el estudio y desarrollo de un proyecto de interconexión en extra alta tensión para abastecer proyectos mineros en la Puna, con un desembolso estimado de USD 600 millones.
El RIGI se presenta como una herramienta clave para atraer inversiones que generen empleo y desarrollo en las provincias involucradas. La combinación de incentivos fiscales y cambiarios busca no solo fomentar la inversión en sectores estratégicos, sino también diversificar la economía argentina, que históricamente ha dependido de la agricultura y la ganadería.
Los proyectos relacionados con la minería y la energía no solo prometen un impacto económico directo, sino que también pueden contribuir a la sostenibilidad energética del país, especialmente en un contexto global donde la demanda de recursos como el litio está en constante aumento debido a la transición hacia energías más limpias.