Por Agroempresario.com
El Canal de Panamá se encuentra en el centro de una polémica luego de que el Departamento de Estado de Estados Unidos afirmara que el gobierno panameño acordó eximir a sus buques del pago de peajes por transitar la vía interoceánica. Sin embargo, la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) desmintió esta afirmación, asegurando que no se ha realizado ningún ajuste en las tarifas establecidas.
El anuncio del Departamento de Estado generó gran revuelo en Panamá, avivando el debate sobre la soberanía y neutralidad de la vía interoceánica. A través de un comunicado publicado en redes sociales, Washington declaró que el acuerdo con Panamá permitirá a los buques del gobierno estadounidense ahorrar millones de dólares al año, lo que generó especulaciones sobre los posibles efectos de esta medida en las relaciones internacionales y la administración del Canal.
En respuesta, la ACP, que tiene la autoridad para fijar los peajes y otros derechos de tránsito, aseguró que "no ha realizado ajuste alguno" a las tarifas de los buques que transitan por el Canal. "En atención a publicación divulgada por el Departamento de Estado de Estados Unidos, la Autoridad del Canal de Panamá comunica que no ha realizado ajuste alguno a los mismos", indicó la entidad en su comunicado oficial, subrayando su independencia en la fijación de tarifas.
El debate se intensificó luego de que el Pentágono confirmara que el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, mantuvo conversaciones con el ministro de Seguridad Pública de Panamá, Frank Ábrego, sobre el acceso sin restricciones al Canal y la importancia de mantenerlo "libre de interferencias extranjeras". Esta conversación ocurre en un contexto de tensiones crecientes entre ambos países, luego de que el expresidente estadounidense, Donald Trump, expresara públicamente su deseo de "recuperar el control" del Canal, citando la creciente influencia de China en la administración panameña.
En este contexto, el gobierno de Panamá ha tomado medidas para reducir su relación con China. Esto incluye la decisión de no renovar el acuerdo de cooperación con el gigante asiático en el marco de la iniciativa de la nueva Ruta de la Seda. Las tensiones sobre la relación con China y las presiones de Estados Unidos para garantizar el acceso irrestricto al Canal de Panamá no son nuevas, y la reciente afirmación de Washington ha reavivado estos debates.
Pese a la negativa oficial de la ACP sobre la exención de peajes, la entidad panameña reconoció que se ha discutido con el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, sobre la posibilidad de "optimizar la prioridad en el tránsito de sus buques". La ACP señaló que esta conversación tiene como objetivo mejorar la coordinación para agilizar el tránsito de buques de la Marina de Guerra de Estados Unidos, pero en ningún momento se mencionó una exención de tarifas.
Este tipo de discusiones no es raro, ya que el Canal de Panamá, administrado por la ACP desde su transferencia a Panamá en 1999, sigue siendo una infraestructura clave para el comercio global y una fuente importante de ingresos para el país centroamericano. Desde su reapertura tras su transferencia, la ACP ha sido responsable de la fijación de tarifas para todos los buques que transitan por la vía interoceánica, incluidas las embarcaciones de guerra de Estados Unidos.
Desde que Panamá asumió el control del Canal, los peajes para los buques de guerra, incluidos los de Estados Unidos, se han calculado en función de las toneladas de desplazamiento máximo de agua, una estructura distinta a la que se utiliza para los barcos comerciales. Según cifras de la ACP, desde 1998 hasta el cierre del año fiscal 2024, solo el 0,3% de los buques que transitaron el Canal fueron de guerra o submarinos de la Marina de los Estados Unidos, sumando un total de 994 embarcaciones. Estos buques generaron ingresos de aproximadamente 25,4 millones de dólares en peajes, lo que representa menos de un millón de dólares anuales.
La reciente controversia subraya la importancia estratégica del Canal de Panamá para Estados Unidos y el mundo, un lugar clave para el comercio intercontinental. Si bien el gobierno panameño ha mantenido su postura de independencia en la administración del Canal, los debates sobre la soberanía y las relaciones internacionales siguen siendo un tema central en la agenda de Panamá. La desmentida de la ACP sobre la exención de tarifas reafirma su control sobre la infraestructura, pero la influencia de Estados Unidos sigue siendo significativa, especialmente en temas de seguridad y acceso a la vía interoceánica.