Por Agroempresario.com
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) confirmó un nuevo caso de rabia paresiante en un bovino en la localidad de Puerto Caraguatay, Montecarlo, Misiones. Ante esta situación, se implementaron medidas sanitarias para evitar la propagación del virus, incluyendo la vacunación obligatoria y la interdicción del predio afectado.
El protocolo sanitario del Senasa establece la vacunación de todas las especies susceptibles (bovina, equina, caprina, porcina y ovina) dentro del establecimiento afectado y en un radio de 10 km alrededor del brote. Asimismo, se restringieron los movimientos de animales en las unidades productivas de la zona.
La vacunación debe ser realizada por los productores con dosis aprobadas por el Senasa. En caso de primovacunados, se debe aplicar una primera dosis y una segunda entre los 30 y 60 días posteriores. Luego, es obligatoria una revacunación anual.
Para controlar la propagación de la enfermedad, el Senasa recomienda:
La rabia paresiante es una zoonosis mortal, lo que significa que puede transmitirse a los humanos. Por esta razón, se aconseja evitar el contacto con animales muertos o con síntomas compatibles con la enfermedad.
El Senasa destacó la importancia de la colaboración entre productores, veterinarios y organismos sanitarios para contener la enfermedad y proteger la salud animal y pública.