La cosecha de maíz con destino a grano comercial se concentra en las provincias de Santa Fe y Entre Ríos, con avances incipientes en Buenos Aires. “Las lluvias últimas tuvieron un impacto positivo en los planteos tardíos, los cuales se encuentran en período crítico (VT-R1) en un 70% de los casos relevados” plantearon especialistas de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires y añadieron que “la proporción de lotes en condición entre normal y excelente mostró una mejora deteniendo el deterioro observado en enero y lo que va de febrero”.
Los planteos de fecha intermedia, sembrados entre mediados de octubre y principios de noviembre, fueron los más afectados por el déficit hídrico y las temperaturas elevadas durante la floración. “En estos casos, las precipitaciones recientes no generaron una mejora significativa en su estado, ya que la etapa fenológica clave transcurrió bajo condiciones adversas” explicaron los técnicos de la BCBA y concluyeron que “en la porción sur del área agrícola, no se registraron eventos de precipitación generalizados y la evolución del cultivo en esta región dependerá críticamente de los pronósticos climáticos a corto plazo ya que la disponibilidad de agua será determinante para un adecuado cuaje de los granos”.
AgroNoa