Por Agroempresario.com
El sector agroexportador argentino está en alerta frente a la incertidumbre que rodea a la concesión de la Hidrovía del Paraná y Paraguay, un sistema fluvial clave para las exportaciones del país. Cuatro de las principales entidades que agrupan a los productores de granos y derivados emitieron un comunicado en el que exigen al Gobierno que retome el proceso de licitación para la concesión del dragado y balizamiento de esta vía estratégica.
En su declaración, las entidades reclaman que el Ejecutivo acelere la licitación de la Vía Navegable Troncal (VNT), que conecta el interior de Argentina con el Atlántico. “Solicitamos al Gobierno que retome cuanto antes el proceso de licitación para el dragado y balizamiento del sistema, garantizando que sea transparente, a riesgo empresario y sin aportes del Estado”, expresaron los representantes del agro. El reclamo surge luego de que el Gobierno decidiera, el pasado 12 de febrero, cancelar la licitación que tenía como objetivo adjudicar la concesión de la hidrovía por un período de 30 años. La razón fue que solo se presentó una oferta formal, lo que, según las autoridades, sería un intento de sabotear el proceso.
La licitación había sido lanzada en noviembre de 2024, con la intención de entregar la operación de la hidrovía a un operador privado que se encargara del peaje, la modernización y el mantenimiento del sistema. Sin embargo, el proceso estuvo marcado por acusaciones de favoritismo hacia la empresa responsable del dragado del canal, que actualmente maneja el sistema fluvial, esencial para la salida de buques de carga de la región.
Desde las entidades agroexportadoras, se resaltó que la modernización de la hidrovía es “fundamental” para mejorar la competitividad del sector y reducir los altos costos logísticos que afectan la exportación de productos. En su comunicado, pidieron que el Gobierno trabaje junto a los usuarios del sistema fluvial para definir un nuevo pliego de licitación que sea “atractivo para los posibles oferentes, con el objetivo de obtener las tarifas de peaje más bajas posibles”.
El sistema fluvial en cuestión es vital para el comercio exterior de Argentina, ya que a través de él se transporta aproximadamente el 80% de las exportaciones del país, sobre todo granos y productos derivados. Además de ser esencial para Argentina, la hidrovía es utilizada también por otros países de la región como Brasil, Bolivia, Uruguay y Paraguay, naciones que en 1992 suscribieron un acuerdo para facilitar la navegación y el comercio en esta vía de transporte clave.
La administración de la hidrovía ha estado en el centro del debate en los últimos años. Durante 25 años, la concesión estuvo en manos de un consorcio privado formado por empresas argentinas y extranjeras. Sin embargo, en 2021, tras la expiración del contrato, el Estado argentino asumió el control de la VNT. La incertidumbre creada por la cancelación de la licitación y la falta de avances concretos en el proceso ha generado preocupación entre los actores del comercio exterior.
Los empresarios del agro advierten que la falta de una concesión firme podría afectar la competitividad de Argentina a nivel global, generando un aumento de los costos logísticos y retrasos en el comercio de productos clave para la economía nacional. Además, subrayan la importancia de asegurar un operador eficiente y comprometido con la modernización del sistema fluvial, lo cual permitirá optimizar la capacidad de transporte y reducir los costos de exportación para los productores. Sin un acuerdo claro sobre la concesión, el futuro de la hidrovía sigue siendo una incógnita que pone en riesgo el rendimiento del sector agroexportador.