Por Agroempresario.com
En un contexto de creciente incertidumbre sobre la economía argentina, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, dio una declaración que trajo algo de claridad respecto al acuerdo entre el organismo internacional y el gobierno de Javier Milei. En una entrevista con la agencia Reuters, Georgieva reconoció como “razonable” la solicitud argentina de recibir un desembolso inicial del 40% de un nuevo programa de crédito, lo que implicaría un giro cercano a los US$8000 millones. Esta cifra es parte del nuevo préstamo de US$20.000 millones que se encuentra en proceso de negociación entre las autoridades argentinas y el FMI.
"Es una petición razonable. Se la han ganado, dado su desempeño", afirmó Georgieva, destacando los esfuerzos del gobierno de Milei en la implementación de reformas económicas, una señal positiva en medio de las tensiones que genera el acuerdo con el FMI en la sociedad argentina.
El monto inicial que podría recibir Argentina está en línea con la práctica habitual del FMI, que suele realizar un primer desembolso más grande para reforzar las reservas internacionales de los países que atraviesan dificultades económicas. En el caso de la administración de Alberto Fernández, por ejemplo, el primer desembolso realizado en 2022 alcanzó casi los US$10.000 millones, mientras que el acuerdo de 2018 con Mauricio Macri, en el contexto de una crisis cambiaria, permitió un desembolso cercano a los US$15.000 millones.
La declaración de Georgieva llega en un momento crítico para la economía argentina, que enfrenta una elevada volatilidad en los mercados cambiarios. Las expectativas sobre el acuerdo con el FMI y sus desembolsos están generando presiones tanto en los mercados internacionales como en la política local. El gobierno de Javier Milei ha sido blanco de críticas, especialmente desde la oposición, quienes acusan al oficialismo de estar sometido a las exigencias del Fondo y de no tener claro un rumbo económico sustentable. Sin embargo, la dirigente del FMI expresó que el rendimiento económico del gobierno de Milei le ha ganado el derecho de solicitar un desembolso inicial más alto.
A pesar de esta afirmación, la especulación sobre los detalles del nuevo acuerdo ha generado incertidumbre. Los mercados reaccionaron positivamente a la declaración de Georgieva, pero persisten las dudas sobre qué tipo de políticas cambiarias y fiscales serán implementadas a cambio del nuevo desembolso, un tema de vital importancia para los analistas y operadores económicos locales.
El nuevo acuerdo entre Argentina y el FMI se da en un contexto de aguda crisis económica, con una inflación desbordada, un peso devaluado y un nivel de reservas internacionales muy por debajo de lo deseado por las autoridades monetarias. Para muchos, el Fondo representa una fuente crucial de financiamiento para estabilizar la economía argentina y evitar un colapso en los pagos de la deuda externa.
En cuanto al cronograma de desembolsos, se espera que el FMI defina los detalles sobre el calendario de pagos una vez que el Directorio Ejecutivo apruebe el nuevo programa. De acuerdo con las declaraciones de Georgieva, se espera que la negociación se cierre antes de las reuniones de primavera del FMI y el Banco Mundial, previstas para finales de abril en Washington.
Si bien el FMI ha mantenido discreción sobre los detalles de la negociación, la divulgación del monto total de US$20.000 millones de préstamo fue confirmada en una publicación posterior realizada por Julie Kozack, directora de Comunicaciones del FMI. "Cualquier paquete acordado y su escalonamiento están sujetos a la aprobación del Directorio Ejecutivo del FMI", señaló Kozack. Además, agregó que el progreso del acuerdo es significativo y que el proceso de colaboración continúa a nivel técnico para garantizar que el nuevo programa ayude a consolidar el exitoso plan económico de Argentina.
La situación, no obstante, sigue siendo tensa. En una entrevista reciente, el ministro de Economía, Luis Caputo, afirmó que aún restaba definir el cronograma de desembolsos y la forma en que el FMI estructurará el programa. En particular, destacó que el gobierno de Milei había solicitado un desembolso mucho mayor que los giros convencionales del Fondo, lo que añade un nivel de complejidad a las negociaciones. Además, Caputo reiteró que el gobierno de Milei no aceptará condiciones que impliquen una devaluación abrupta del peso, lo que genera una gran incertidumbre en torno a la política cambiaria.
En Argentina, los operadores económicos están observando de cerca las señales emitidas por el FMI, ya que cualquier avance en las negociaciones podría tener repercusiones significativas en el mercado cambiario local. Aunque las expectativas mejoraron tras las palabras de Georgieva, el mercado sigue siendo cauteloso. Según Pablo Repetto, jefe de analistas de Aurum Valores, la declaración de Georgieva puede ayudar a moderar el estrés del mercado, pero el verdadero factor de incertidumbre sigue siendo la política cambiaria que el gobierno se comprometerá a implementar. “Es una buena noticia que Georgieva haya mencionado el desembolso inicial de US$8000 millones, ya que ayuda a reducir un poco la ansiedad en los mercados. Sin embargo, el tema central sigue siendo cuál será el esquema cambiario que se aplicará”, comentó Repetto.
Martín Polo, economista de la consultora Bein & Asociados, también expresó que aunque la afirmación de Georgieva es positiva, la incertidumbre sobre la política cambiaria sigue siendo el principal factor que mantiene a los mercados en vilo. "La noticia de un desembolso de US$8000 millones puede ayudar a calmar momentáneamente las tensiones, pero el mercado necesita claridad sobre la política cambiaria que acompañará este acuerdo", indicó Polo.
Si bien las declaraciones del FMI son un alivio para el gobierno de Milei, también ponen de manifiesto las grandes decisiones económicas que aún deberá tomar. La principal preocupación sigue siendo la estabilidad de las reservas del Banco Central, que es clave para que el país pueda hacer frente a sus obligaciones de deuda y evitar una crisis cambiaria. Por otro lado, la incertidumbre sobre las políticas fiscales, monetarias y cambiarias podría seguir afectando la percepción de los inversores internacionales sobre la viabilidad del plan económico de Milei.
En este contexto, la economía argentina se enfrenta a un futuro lleno de desafíos, donde el nuevo acuerdo con el FMI jugará un papel central para garantizar la estabilidad financiera y económica del país. Si bien el desembolso inicial parece estar en camino, las verdaderas pruebas para el gobierno de Milei aún están por venir, y dependerán de las decisiones que tome sobre la política económica en el corto y mediano plazo.