Meloni refuerza su vínculo con Trump en medio de la tensión por los aranceles entre Europa y EE.UU

Por Agroempresario.com

En una visita cargada de simbolismo y estrategia, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, fue recibida este jueves por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Casa Blanca. El encuentro tuvo como ejes centrales la escalada de tensiones comerciales entre Washington y Europa, y la búsqueda de una salida diplomática al conflicto entre Rusia y Ucrania.

La reunión entre ambos líderes no solo confirma la sintonía ideológica entre Roma y Washington, sino que también posiciona a Meloni como la interlocutora clave de la Unión Europea ante la administración republicana. La premier italiana fue la única dirigente europea que asistió a la asunción de Trump, y ahora se convierte en la primera en visitarlo formalmente desde su regreso al poder.

En la agenda de trabajo, el tema más urgente fue el aumento de los aranceles recíprocos que podrían afectar duramente las exportaciones europeas. Meloni busca evitar una guerra comercial de gran escala que tendría consecuencias económicas para todo el continente. La líder italiana ya había conversado con Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, y con el comisario de Comercio Maros Sefcovic, para consensuar una propuesta que pudiera frenar la avanzada proteccionista de Trump.

Sefcovic planteó al secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, un esquema de “arancel cero” para bienes industriales. Aunque Lutnick no dio una respuesta definitiva, Trump dejó claro que sólo aceptará concesiones si son absolutamente favorables para la economía norteamericana.

Meloni, sin embargo, se mostró determinada a defender la posición europea. “Soy consciente de lo que represento y de lo que defiendo. Le diré a Trump que los productos italianos generan riqueza en los países que los importan”, declaró antes de partir desde Roma.

Trump ya ha escuchado argumentos similares de otros aliados ideológicos como el israelí Benjamín Netanyahu y el argentino Javier Milei, pero su postura permanece firme. El republicano lanzó una ofensiva proteccionista que apunta a reducir el déficit comercial estadounidense, incluso a costa de sus vínculos tradicionales con Europa y otros socios estratégicos.

Además del plano económico, Trump y Meloni discutieron la situación en Ucrania. La premier italiana apoya los esfuerzos diplomáticos liderados por Estados Unidos para lograr un cese del fuego entre Kyiv y Moscú. En contraposición, se ha desmarcado de la propuesta de Emmanuel Macron y Keir Starmer, quienes sugieren desplegar tropas francesas y británicas para respaldar la seguridad ucraniana en una eventual tregua.

Tanto Meloni como Trump consideran que una intervención militar directa en la región podría escalar el conflicto y generar una respuesta agresiva de parte del Kremlin. Coinciden en que la solución debe construirse mediante la negociación y no por medio de acciones unilaterales que tensen aún más el escenario geopolítico.

La visita de Meloni también incluye una señal de continuidad en la cooperación bilateral. Mañana, la premier recibirá en Roma al vicepresidente estadounidense JD Vance, quien iniciará una breve gira por Italia e India como parte del esfuerzo del gobierno republicano por reforzar sus vínculos estratégicos con aliados clave.

La cumbre entre Trump y Meloni no solo dejó en evidencia una alianza política consolidada, sino que también podría marcar un giro en la relación transatlántica. Con una Europa fragmentada frente a los desafíos comerciales y de seguridad, Italia emerge como un actor con influencia directa sobre la toma de decisiones en Washington.

Mientras tanto, el futuro del comercio global y la estabilidad en Europa del Este dependen en buena parte de las definiciones que surjan de este renovado eje entre Roma y Washington.