Por Agroempresario.com
En un contexto regional marcado por la inestabilidad normativa y la presión impositiva sobre el agro, Paraguay se destaca con un modelo ganadero que combina previsibilidad, baja carga tributaria y una fuerte articulación público-privada. Así lo explicó Marcos Medina, exministro de Agricultura y Ganadería del país vecino, durante una entrevista con Chacra Agro Continental, donde detalló las claves del sostenido crecimiento de la carne paraguaya en los mercados internacionales.
Según Medina, desde fines de los años 90 Paraguay adoptó una estrategia basada en el trabajo conjunto entre el sector privado y el Estado. Este enfoque permitió erradicar enfermedades del rodeo, alcanzar estándares sanitarios internacionales y abrir progresivamente mercados exigentes. “Pasamos de exportar 50 millones de dólares en el año 2000 a superar los 2.100 millones en 2023”, remarcó el exfuncionario, quien también destacó las inversiones privadas en la industria frigorífica y en genética animal como motores clave del proceso.
Hoy el objetivo de Paraguay no es sólo mantener lo conseguido, sino avanzar hacia un posicionamiento de su carne por atributos diferenciales como la producción a pasto, libre de hormonas y aditivos. “Eso es algo muy valorado en mercados como la Unión Europea, pero se necesita una estrategia de marketing a la altura, que todavía está pendiente”, señaló Medina.
A su vez, subrayó que el país enfrenta desafíos estructurales, como la escasez de mano de obra calificada en el ámbito rural y la falta de investigación aplicada al clima subtropical local, condiciones que exigen soluciones específicas.
Uno de los puntos más destacados del modelo paraguayo es la previsibilidad. “Llevamos 25 años con las mismas reglas de juego”, sostuvo Medina. El sistema impositivo contempla un IVA del 5% para insumos agropecuarios y un impuesto a la renta del 10% para la actividad agropecuaria. Además, no existen retenciones ni gravámenes a las exportaciones. Por el contrario, el Estado devuelve el IVA a los exportadores, lo que actúa como un incentivo para incrementar las ventas al exterior.
“Paraguay no tiene un mercado interno grande. Por eso, la política pública está orientada hacia la exportación, acompañando con infraestructura, sanidad y acuerdos internacionales”, explicó.
Con un stock ganadero de 13,4 millones de cabezas, Paraguay mantiene una producción de alrededor de 650 mil toneladas de carne al año, de las cuales más del 70% se exporta. Sus principales destinos son Chile, Taiwán, Estados Unidos, Brasil e Israel, aunque el país llega a más de 40 mercados. Además, su genética ganadera combina razas cebuinas con británicas, con fuerte influencia del modelo argentino.
Frente a las recientes subas arancelarias dispuestas por Estados Unidos, Medina reconoció la preocupación por el impacto en los precios, aunque descartó un freno total a las importaciones. “Este tipo de medidas generan incertidumbre y retrocesos en el comercio global”, advirtió.