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Por Agroempresario.com
En un hito estratégico para el comercio latinoamericano, los bloques económicos del MERCOSUR y la Alianza del Pacífico firmaron un Acuerdo de Reconocimiento Mutuo (ARM) entre sus programas de Operador Económico Autorizado (OEA). Este pacto, anunciado durante la XXVII Conferencia Regional de Directores Generales de Aduanas de las Américas y el Caribe en El Salvador, representa un paso decisivo hacia una logística más eficiente, segura y competitiva para la región.
A diferencia de los tratados de libre comercio, este acuerdo no modifica los aranceles ni introduce nuevas preferencias impositivas. Su valor reside en lo operacional: al permitir el reconocimiento mutuo de empresas certificadas como seguras y confiables por las aduanas de cada bloque, se redujeron los controles físicos y documentales, se aceleraron los tiempos de despacho y se fortaleció la trazabilidad del comercio exterior.
La implementación del ARM otorga a las empresas que ya cumplen con los estándares OEA/OEC una ventaja logística clara: su condición de operador confiable es válida tanto en los países del MERCOSUR como en los de la Alianza del Pacífico. Esto se traduce en menos inspecciones, menos burocracia, y mayor previsibilidad.
En un contexto global signado por la fragmentación de las cadenas de suministro, el ARM aporta una solución concreta para las empresas que operan en puertos, depósitos fiscales y zonas francas. Especialmente para quienes transportan cargas desde países como Argentina, Brasil o Uruguay hacia México, Perú o Colombia, este reconocimiento mutuo facilita la circulación de mercancías y reduce los costos operativos.
El acuerdo también apunta a reforzar la cooperación técnica entre las administraciones aduaneras. En este sentido, países como Uruguay, Chile y Colombia ya comenzaron a trabajar en planes conjuntos para armonizar sus procedimientos, unificar estándares y digitalizar procesos, lo cual resulta clave para combatir prácticas ilícitas como el contrabando y la subvaloración de mercancías.
Desde la óptica de la logística internacional, el ARM se perfila como un paso hacia la interoperabilidad, abriendo la puerta a sistemas electrónicos integrados y plataformas de trazabilidad compartidas. De hecho, la experiencia europea demuestra que este tipo de acuerdos puede derivar en un ecosistema logístico regional más coordinado, confiable y tecnológicamente avanzado.
Si bien el acuerdo beneficia a grandes operadores logísticos, también representa una oportunidad para las pequeñas y medianas empresas exportadoras. Muchas de estas firmas suelen enfrentar barreras de entrada al comercio internacional debido a la complejidad normativa y la falta de recursos técnicos.
Con el apoyo adecuado por parte de los gobiernos —en forma de capacitaciones, asistencia técnica y financiamiento para obtener la certificación OEA— las pymes podrían integrarse con mayor facilidad a los flujos regionales. Este tipo de inclusión productiva no solo impulsa el desarrollo exportador, sino que fortalece las economías locales y diversifica la oferta regional.
La firma del ARM entre el MERCOSUR y la Alianza del Pacífico constituye un mensaje claro: la integración regional puede avanzar desde lo concreto y lo técnico. En un mundo donde la eficiencia logística y la seguridad aduanera son factores de competitividad, coordinar normativas y reconocer estándares compartidos permite a los países de América Latina posicionarse mejor en los mercados internacionales.
A largo plazo, este acuerdo podría funcionar como plataforma para futuras iniciativas de integración comercial, como la construcción de corredores logísticos regionales, la interoperabilidad de sistemas portuarios, y el desarrollo de marcos normativos conjuntos que potencien las exportaciones con valor agregado.
En suma, el ARM no solo reduce tiempos y costos para los exportadores: también promueve un comercio más ordenado, transparente y resiliente. Si se implementa de forma eficaz, con visión estratégica y voluntad política, puede convertirse en un verdadero catalizador del desarrollo regional.
