Por Agroempresario.com
En un contexto económico que combina expectativas de estabilidad con interrogantes estructurales, el economista y expresidente del Banco Central, Martín Redrado, analizó en profundidad los desafíos que enfrenta el gobierno de Javier Milei para mantener el dólar barato y consolidar la baja en la inflación. En declaraciones realizadas en el programa Comunidad de Negocios (LN+), Redrado habló sobre la necesidad de “externalizar” los dólares que ya están en la Argentina, y sostuvo que aún restan “dos batallas” clave para alcanzar la estabilidad económica.
“La clave para que el dólar se mantenga barato es generar más dólares, tanto por inversiones como por exportaciones”, sostuvo Redrado. Y fue más allá: “El tipo de cambio actual es sustentable, pero siempre que tengamos más dólares”. Según su visión, el desafío no pasa exclusivamente por atraer nueva inversión extranjera o incrementar las exportaciones, sino también por lograr que los dólares físicos que circulan en la informalidad ingresen al sistema financiero.
Redrado introdujo el concepto de “externalización de los dólares” como medida central para sostener un tipo de cambio competitivo. “Hay que permitir que los dólares que están en cajas de seguridad o debajo del colchón puedan circular, como sucede en países como Uruguay o Perú”, explicó. Esta estrategia, según dijo, implica dar una batalla frontal contra la informalidad y establecer canales seguros y legales para que los ahorros en divisa estadounidense formen parte del circuito productivo.
En esta línea, el economista también sugirió que el Gobierno y la Cancillería Argentina deberían enfocarse en cerrar acuerdos de protección de inversiones con países complementarios, así como abrir nuevas rutas comerciales que potencien las exportaciones.
Al referirse a la inflación, Redrado afirmó que el Gobierno ha avanzado con éxito en materia fiscal y monetaria, pero que aún le queda “la prueba de fuego” en dos frentes: el cambiario y el financiero. “Para tener un marco económico estable se necesitan cuatro patas: la fiscal, la monetaria, la cambiaria y la financiera. Y en estas dos últimas todavía no se aprobaron los exámenes”, advirtió.
En lo cambiario, explicó, aún falta avanzar hacia una libertad cambiaria total, acompañada de intervenciones anticíclicas. Es decir, ahorrar en tiempos de bonanza para poder intervenir en el mercado en momentos de volatilidad global sin comprometer reservas estratégicas.
Por su parte, en el terreno financiero, Redrado propuso que Argentina debe volver a los mercados internacionales de crédito para renovar vencimientos, cambiar acreedores y, eventualmente, salir del Fondo Monetario Internacional (FMI). “El día que estemos financiándonos en mercados voluntarios de capitales, ahí habremos pasado la prueba de la inflación”, resumió.
Redrado valoró la desaceleración inflacionaria, que según estimaciones privadas podría ubicarse en torno al 2% en mayo, como “uno de los activos más importantes del Gobierno”. Sin embargo, alertó sobre los riesgos de utilizar anclas temporales, como el freno en la pauta salarial, para mantener bajo control los precios.
“El salario promedio en mayo estará en 2,3%, pero en los tres meses anteriores viene creciendo solo 1,2% mensual, contra una inflación del 2,8%. En junio ocurrirá algo similar por los aumentos en servicios públicos. Si bien ahora es una foto, cuidado con que no se transforme en una película”, advirtió.
Finalmente, el economista elogió el uso de “todos los instrumentos de política económica” por parte del equipo de Milei, aunque advirtió que el camino hacia una estabilidad genuina aún no está asegurado. “El gobierno necesita dar señales claras y sostenibles en el tiempo. Sin esas ‘pruebas de fuego’ en lo cambiario y financiero, la inflación puede volver a ser protagonista”, concluyó.